Duran acusa al tripartito de convertir Barcelona en "capital de los antisistema"

Barcelona/El líder de UDC y secretario general de CiU, Josep Antoni Duran, ha acusado al anterior gobierno tripartito y a la "cultura de izquierdas" de haber permitido que Barcelona se convirtiera en capital de los antisistema a raíz de los altercados en torno al Parlamento catalán, cuya responsabilidad ha desvinculado del movimiento de los indignados porque siempre se han manifestado contra la violencia.

En su carta web semanal ha remarcado que, al margen del movimiento 15-M, la capital catalana alberga personas cada vez más organizadas, violentas y con instrumentos y capacidad para destrozar cualquier acto público.

"Barcelona es la capital de los antisistema. Conviven entre nosotros desde hace mucho tiempo", ha avisado, reprochando a los gobiernos de Barcelona y de Cataluña de estos últimos años -ambos socialistas- que permitieran que creciera este colectivo. Según Duran, esta política, sumada a "la inhibición de la policía por responsabilidad de sus mandos políticos", ha conllevado un efecto llamada de este tipo de personas.

Complejos

Por ello, ha abogado por recuperar el valor de la autoridad en la sociedad, la familia y la educación, porque "tantos años de autoritarismo a lo largo de la dictadura han provocado demasiados complejos que en nombre del término equívoco 'progresismo' han impedido ejercer la autoridad".

Precisamente, según él, se ha actuado con complejos para actuar con autoridad con el 15-M, pese a entender el principio del movimiento y destacar que desalojarlos en vigilias electorales habría sido un error.

Después de los comicios, sin embargo, considera que no tenía sentido permitir que continuaran acampados en la Plaza Cataluña, por lo que ha defendido la actuación policial del 27 de mayo, negando que fuera desproporcionada: "En un estado democrático, la policía tiene que actuar y, si es necesario, con contundencia. Y si la acción es desproporcionada, la justicia es la que tiene que intervenir".

En relación a los indignados, Duran ha negado que sean los responsables directos de los incidentes alrededor del Parc de la Ciutadella, donde está el Parlamento catalán, aunque les ha instado a ser conscientes de que sus concentraciones han sido desbordadas por los antisistema y de que ya no pueden controlar sus movimientos.

Aunque entiende la indignación de muchas personas por los efectos de la crisis, ha abogado por respetar el 15-M, que define como un movimiento más de protesta que de propuesta, siempre que defienda sus ideas a través de la palabra y no con violencia.

Pese a todo, Duran ha constatado que no comparte y ve contradictorias algunas de sus propuestas porque, a su juicio, no se puede pedir más democracia y representatividad de los parlamentarios y proponer un nuevo sistema electoral con una circunscripción única para toda España ya que alejaría más al ciudadano de la política.

Además, ha pedido responsabilidad a los políticos, a los medios de comunicación y a la justicia porque han sido "demasiado a menudo poco beligerantes" con los antisistema. "Aquí sólo hay dos opciones: la democracia o la anarquía. Y la primera es manifiestamente mejorable y la segunda es claramente empeorable. Nos jugamos el futuro", ha concluido.