La aldaba
Carlos Navarro Antolín
La lección de Manu Sánchez
Madrid/Las Cortes Generales celebran este martes el día de la Constitución en un clima preelectoral y de mayor crispación política, con el Poder Judicial sin renovar cuatro años después y con polémicas como la reforma de la sedición, a la que se opone la derecha y que no ven con buenos ojos algunos dirigentes del PSOE.
La presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, presidirá el acto institucional por el 44 aniversario de la Constitución en la escalinata de la Puerta de los Leones de la Cámara Baja acompañada entre otros por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; y el presidente del Senado, Ander Gil, que no pudo acudir el año anterior por covid.
También asistirán el todavía presidente del Tribunal Constitucional, Pedro González-Trevijano, y Rafael Mozo, que sigue como presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en sustitución de Carlos Lesmes tras su dimisión en octubre por la falta de renovación de un órgano que va a cumplir cuatro años en funciones.
El bloqueo del Poder Judicial sobrevolará un año más el acto de celebración de la Constitución, envuelto en un clima de creciente crispación política por las trifulcas vividas los últimos días en el Congreso y por la reciente polémica por la reforma del delito de sedición, que el Gobierno prevé cerrar antes de finales de año.
Una reforma que los grupos de la derecha consideran un ataque a la Constitución y que no ven con buenos ojos dirigentes socialistas como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page.
Pero lo que verdaderamente genera dudas y malestar entre grupos de la izquierda es la posibilidad de reformar también el delito de malversación, una petición que ERC asegura que está negociando con el PSOE en la fase de presentación de enmiendas parciales, que finaliza este viernes, aunque en el Gobierno insisten en que no hay novedades al respecto.
Al acto de celebración de la Constitución, en el que sigue pendiente la reforma para eliminar el término "disminuido" pese al compromiso del PSOE y el PP, no acudirán como suele ser habitual representantes de formaciones nacionalistas e independentistas.
Como novedad, este año se ausentará también Vox, que no participará en el acto institucional para no coincidir con quienes, en su opinión, "violan" la Constitución y "buscan destruirla", aunque algunos diputados del grupo acudirán a las puertas del Congreso para celebrar la vigencia del texto.
Además de Sánchez, acudirán al acto la mayor parte de ministros del Ejecutivo de coalición, incluidas Irene Montero y Yolanda Díaz, aunque el titular de Consumo, Alberto Garzón, no asistirá al estar de visita oficial en Colombia.
Al acto, con un marcado carácter preelectoral, también asistirán el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo; y la de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que coincidirá con su portavoz parlamentario, Edmundo Bal, que también asiste y con el que está en plena disputa por el liderazgo del partido.
La celebración del día de la Constitución tendrá lugar en la calle por tercer año consecutivo pero esta vez no por las restricciones por la covid sino para hacerlo extensible a todos los ciudadanos.
Comenzará a las 10.00 horas con el izado de bandera en las inmediaciones de la Carrera de San Jerónimo y a partir de las 12.30 horas empezará el acto institucional con la intervención de Batet frente al resto de autoridades e invitados, que al finalizar se dirigirán al Salón de Conferencias del Congreso, conocido como Salón de Pasos Perdidos, para una recepción.
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