"¿Tuitear? No lo permita Dios"

Juan Eslava Galán | Escritor

Juan Eslava Galán.
Juan Eslava Galán. / Juan Carlos Muñoz

SIEMPRE ESCÉPTICO. El trajín de las promociones lo deja molido por su edad y las cicatrices del tiempo en su cuerpo. Pero ahí sigue Juan Eslava Galán (Arjona, Jaén, 1948) haciendo la gira para contarnos, como cada año, su décima obra en tapa dura para todos los públicos amantes del saber. Historia de Roma contada para escépticos (Planeta) desgrana la larga vida y la decadencia del Imperio Romano, otra muesca indispensable en el revólver editorial del jiennense.

–¿Rómulo o Remo?

–Soy de las sabinas, las mujeres que vinieron después y propiciaron realmente el mérito de Roma.

–Tiene hechuras de senador romano, un halago comparado con los de hoy...

–Había cada pieza en el Senado romano de cuidado, no era todo trigo limpio.

–Elija emperador.

–Tengo el corazón dividido: Augusto y Trajano. Mejor el segundo por andaluz.

–En Roma me contaron que en el Coliseo nunca se sacrificaron cristianos. ¡Vaya chasco!

–Se ejecutaban a delincuentes comunes lanzándolos a las fieras. También había cristianos por no santificar al emperador divinizado.

–Sostiene que la peor herencia de Roma fue la corrupción, pero es universal.

–Era un plato diario y se asumía. En la república, había dos cónsules sólo por un año; para serlo se embarcaban en gastos de obras públicas, dar comida gratis, y se entrampaban. Luego les podían ofrecer el gobierno de una provincia y resarcían las deudas.

–Ya podíamos practicar más a menudo su maña con las obras hidráulicas...

–Dominaban el agua y ponían la ciudad donde tenía que estar;si no la había, la traían. Las obras públicas definen bien a Roma y a su imperio: las calzadas para las legiones y el comercio, la navegación segura sin piratas... Todo esto lo da la pax romana y ha determinado nuestro mundo.

–Recordando La vida de Brian, ¿qué han hecho los romanos por nosotros?

–Casi todo. Nuestra esencia es el idioma, un latín evolucionado. Y el Derecho, la Justicia, la Ley... son herencias de Roma. La civilización cristiano-occidental es superior al resto por eso.

–¿Quién ha hecho mejor de romano Charles Laughton, Peter Ustinov, Alec Guinness, Marlon Brando...?

–Peter Ustinov se come el personaje en Quo vadis! aunque Nerón no era así. Al principio fue ejemplar, un gobernador morigerado, bueno, aleccionado por Séneca. Luego desvarió. Una teoría no muy aceptada dice que las clases dirigentes endulzaban el vino con limaduras de plomo y eso causaba un envenenamiento en el cerebro que iba empeorando de generación en generación. Quizás sea una causa de la decadencia de Roma.

–Por la annona muchos romanos mamaban de la teta del Estado. ¿Andaba por allí Pablo Iglesias?

–Habría sido un buen pieza en aquel contexto de demagogia, sexo... Me lo imagino con la toga. La annona sólo era en Roma;un subsidio, más bien soborno, para que el pueblo no se encrespara. Pan y circo, como aplican ahora los gobiernos. El pan son las subvenciones; el circo, entonces carreras de carros y gladiadores, hoy es el fútbol, los programas basura de la tele... Somos romanos.

Pablo Iglesias habría sido un buen pieza en esa Roma de demagogia, sexo... Me lo imagino con la toga"

–De haber triunfado las tesis antiimperialistas, en México seguirían sacándole el corazón a los prisioneros, Berlín estaría dividida por un muro y, lo que es peor, en España no tendríamos vino.

–Desde los íberos teníamos la caelia, que era cerveza. Se pierde cuando los fenicios y los romanos traen el vino. Y vuelve con Carlos V. El primer sevillano que fue a Flandes a pedirle cosas para el Ayuntamiento dijo al volver que le habían dado a beber meados de yegua. Estábamos muy desacostumbrados a la cerveza.

–Los jóvenes dicen que algo es su "Imperio Romano" para referirse a un tema que los obsesiona.

–Lo sé. Para la gente joven es una especie de territorio onírico deseable, aunque no tenga mucho que ver.

–Nos creemos modernos y Roma dio el primer caso conocido de transexualidad.

–Está todo inventado. Nihil novum sub sole (Nada nuevo bajo el sol). Ellos hacían operaciones para convertir en eunucos a las personas, con una técnica se podía copular y con otra no. En la decadencia del Imperio, mujeres aficionadas al sexo buscaban a los operados para no quedarse embarazadas.

–No piso países donde no estuvieron los romanos. 

–Estuve en el Éufrates, donde llegaron las legiones, y más allá nunca me llamó la atención. Pero quien va a Sri Lanka no está equivocado.

–Política andaluza. ¿El cambio llegó a la Junta no por el relevo del PSOE por el PP, sino porque salieron del Gobierno los sevillanos/romanos y entraron los malagueños/fenicios?

–La Bética es muy amplia y de las provincias que antes aceptó la cultura romana. No debiera haber diferencias entre los de Sevilla, los de Málaga, los de Almería, los de Jaén... Somos hermanos en las desgracias y deberíamos de unirnos por nuestros intereses.

–Política nacional. ¿Es honesta la mujer del César de La Moncloa? ¿Lo parece?

–Es muy importante serlo y parecerlo. Están dando una imagen un poco torcida de lo que debiera ser ejemplar.

–Con tanto erudito de salón y catedrático de redes sociales, ¿en España quedan escépticos?

–Hay que promoverlos. Damos un crédito excesivo al bombardeo de noticias por las redes sociales y en el papel, que tampoco es sagrado. Es buena una actitud escéptica, no tomarnos esa papilla que nos dan hecha, sino aplicarle inteligencia.

–Escriba Historia de los premios literarios contada para escépticos: dinero, intrigas, gloria, política, sexo...

–No da para tanto, pero sí ingredientes que se pueden mezclar en ellos.

–¿Y la Historia del sanchismo para escépticos?

–Le he dedicado el último capítulo de mi Historia de España contada para escépticos, que pongo al día cada cinco años. Se titula Lucky Sánchez.

–Publica cada año y a veces hasta dos libros, ¿tiene mucho que decir o no sabe hacer otra cosa?

–No sé hacer otra cosa. Me levanto a las cinco, me pongo a trabajar y, si escribo dos folios al día, al cabo del año saco como mínimo un libro gordo... o dos.

–¿Nunca ha tenido la tentación de estar en Twitter y ser tendencia como su amigo Arturo Pérez Reverte?

–Le voy a responder como Lola Flores cuando le preguntaron antes de ir a Nueva York si sabía inglés. Se llevó la mano al pecho y dijo: "No lo permita Dios".

stats