Susana Hornillo: "Queremos un turismo sostenible que revierta en toda la ciudad de Sevilla"

Susana Hornillo (Alcalá de Guadaíra, 1976), candidata a la Alcaldía de Sevilla de 'Con Podemos+IU+...', una "confluencia progresista" de ocho partidos comandados por los dos citados, es doctora ingeniera de Telecomunicación y profesora de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Sevilla, donde lleva algo más de 21 años dando clases en la rama de tratamiento digital de señales y propagación de ondas electromagnéticas. Los otros seis partidos aparte de Podemos e IU son Más País, Verdes Equo, Iniciativa del Pueblo Andaluz, Alianza Verde, Los Verdes Andalucía y Alternativa Republicana.

Nacida en Alcalá de Guadaíra en una familia humilde trabajadora (su padre Alejandro, electricista, y su madre Inmaculada, ama de casa), su pasión desde niña por desmontar calculadoras y máquinas le llevó a trabajar muy muy duro para ser ingeniera ("trabajé todas las horas del día") y profesora en una carrera con predominio de hombres. Madre de un hijo adolescente, vive desde hace 18 años en el barrio de la Macarena. Le gustan los retos y la ingeniería le ha dado soltura en analizar problemas complejos y buscarles solución.

Aterrizó en la política recientemente tras varios años en segundo plano como activista social. Entró en Podemos Sevilla en 2020 como voluntaria en el grupo de colaboración social, donde conoció la difícil situación económica de muchas familias sevillanas a las que ayudaban a tramitar el Ingreso Mínimo Vital.

Tras observar las necesidades sociales de "gran parte de la población sevillana", se animó a dar el paso de presentarse, primero, como portavoz y, luego, como candidata a la Alcaldía con un proyecto para la ciudad.

"La realidad de los barrios es que la gente lo pasa mal y muchas veces la gente se encuentra desamparada. La administración no funciona del todo bien. Hay una brecha digital muy grande, falta atención personalizada", lamenta.

¿Cuáles son los problemas más graves de Sevilla?

De su trabajo como activista social en la ciudad concluye que "Sevilla funciona a dos velocidades" debido a "la preponderancia del turismo sobre todo lo demás, que está marcando esa doble velocidad de Sevilla, con barrios de primera y barrios de segunda".

"Hay una Sevilla que está muy condicionada por el turismo y otra que va a la zaga, que queda olvidada". Explica que el turismo está marcando gran parte del devenir de la ciudad por la fuerte apuesta por este sector aun cuando "no podemos apostar todo al turismo, y menos a un turismo depredador, ya que estamos viendo cómo expulsa día a día a los vecinos de los barrios (se tienen que ir a zonas periféricas), impide un acceso a la vivienda por la concentración de pisos turísticos muy por encima de lo razonable".

Un segundo problema de la ciudad es el empleo. "El empleo está muy condicionado por el turismo, es precario, no estable y tiene una alta estacionalidad, con lo que los jóvenes no tienen muchas oportunidades de futuro".

Un tercer problema son "las zonas de la periferia de la ciudad que están totalmente olvidadas porque no se invierte en ellas lo mismo que en otras zonas, con el argumento de que no se les saca rendimiento desde el punto de vista turístico".

Lamenta que el turismo provoca problemas en los barrios más turísticos y en los que no lo son. "En los barrios más turísticos la vivienda está muy cara, la convivencia es complicada muchas veces porque hay demasiados pisos turísticos. En los barrios periféricos, los vecinos sufren la escasez de inversiones, la movilidad y conexiones con transporte público no es igual de buena que en barrios más céntricos".

Ve urgente replantear el turismo para convertirlo en uno sostenible. "Queremos un turismo sostenible que revierta en la ciudad de forma positiva en toda su amplitud, no en unos barrios sí y en otros no, ni en una pocas manos o unos cuantos negocios turísticos".

Claves de su candidatura para solventar los problemas de Sevilla

Los tres ejes de la candidatura de la "confluencia progresista" son turismo sostenible, lucha contra el cambio climático y una Sevilla feminista.

1. Turismo sostenible. "El turismo no puede expulsar a los vecinos de los barrios ni convertir a Sevilla en un parque temático de forma que la ciudad pierda toda su identidad", destaca Hornillo. Denuncia que "la cifra de visitantes e ingresos es cada año más alta en Sevilla, mientras la ciudad sigue encabezando la lista de los barrios más pobres de España. Esto quiere decir que algo no funciona", recalca.

La candidatura apuesta por una moratoria en la creación de pisos turísticos y por una tasa turística finalista que revierta en toda la ciudad, así como declarar zonas tensionadas los barrios de Sevilla donde la tasa de pisos turísticos crece por encima de un 10%, y denuncia que en algunas zonas del centro la tasa ronda el 30%, lo que califica como "una barbaridad" porque hace que vivienda sea "inasequible" y se generen problemas de convivencia.

2. Poner a Sevilla en la vanguardia de la lucha contra el cambio climático, reverdeciendo Sevilla con pulmones verdes en todos los barrios, y reducir la contaminación mejorando el transporte público y que este sea asequible y atractivo para todo el mundo e incentive a dejar el coche privado. Apuestan por una tarifa plana de 30 euros en el transporte público y descarbonización de los autobuses de Tussam.

3. Una Sevilla feminista. "Una ciudad que te cuide, que te ayude a conciliar y de 15 minutos, donde todo esté a una distancia máxima de 15 minutos andando o en transporte público".