Pilatos

Sevilla/ES curioso cómo una imagen secundaria puede tener tantísima fuerza, pero la tiene. Sí, ya sé que no son imágenes de culto, que simplemente cumplen la función catequética de todo paso de misterio, la representación de un pasaje evangélico de la Pasión. ¿Pero quién puede negar la fuerza evocadora del Poncio Pilatos de San Benito, al que estos días se le puede hablar de tú a tú en la exposición generosamente abierta en Casa Pulido, que es la sede de la Fundación Cajasol? Miras a este Pilatos y ves tu infancia, la de algunos tus parientes, los tramos que se forman en los jardines de las Hermanitas de los Pobres, los Martes Santos del puente que siempre te espera, y el agua fresca al pasar por el tramo umbrío de la calle Santiago a la altura del Corral del Conde... Es secundaria, pero vaya cómo evoca...