El regadío del Guadalquivir verá mejoradas sus dotaciones de riego tras las últimas lluvias

La recuperación del nivel del agua en los embalses de las cuencas hidrográficas andaluzas gracias a las lluvias en Semana Santa hace albergar a los regantes la esperanza de que se suavicen las restricciones en todas las cuencas de la comunidad respecto a las barajadas inicialmente y a que se ponga fin a varias campañas agrícolas de recortes respecto al año anterior por culpa de la sequía.

Pedro Parias, secretario general de la federación de comunidades de regantes del Andalucía Feragua, mayoritaria en la región, ha informado de que en la cuenca el Guadalquivir -la mayor de Andalucía- el escenario está muy próximo al de hace dos años cuando las restricciones fueron del 70% (el año pasado fueron de casi el 90%), aunque no descarta que se llegue a la situación de 2021 en caso de que sigan las lluvias, lo que permitiría una dotación del 50%.

En este sentido, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha señalado en un comunicado que tras las últimas lluvias -una precipitación media en los últimos siete días de 130 litros por metro cuadrado en la cuenca- "se alejan aún más los posibles problemas de escasez en los sistemas de abastecimiento y mejoran sustancialmente las perspectivas de dotaciones para la próxima campaña de riego", lo que anticipa una suavización de los recortes.

Feragua ha solicitado para la primera quincena de abril la celebración de la comisión de desembalse del Guadalquivir, donde se deben decidir las dotaciones definitivas.

Respecto a las cuencas gestionadas por la Junta de Andalucía, Feragua solicita que en el caso se reconsideren las restricciones planteadas hace unas semanas para Guadalete-Barbate y se pase del 75% al 60% de lo que es una dotación normal

En el Tinto-Odiel-Piedras esta federación cree que se puede pasar del 50% al 30% de recorte, mientras que en las cuencas mediterráneas andaluzas -con restricciones anunciadas que oscilan entre el 100% de algunos sistemas hasta el 30% de otros-, también ve un "pequeño margen para suavizar estas limitaciones".

"Ha llovido, pero ha llovido de forma desigual", ha apuntado por su lado Carmen Crespo, consejera de Agricultura, quien ha concretado que, por ahora, se mantiene la planificación hídrica en vigor. Pero ésta puede cambiar, ya que este este viernes se reúne el comité de sequía de Guadalete-Barbate, y la semana próxima el de las cuencas mediterráneas.

La consejera puso el ejemplo negativo del embalse de Cuevas del Almanzora (Almería), donde la mejoría ha sido "prácticamente inexistente", con apenas 1,6 hectómetros cúbicos más, lo que aboca a la provincia de Almería a seguir con las mismas medidas.

Crespo ha apuntado que la Junta va a pedir en el Consejo Nacional del Agua que se reúne este jueves en Madrid "toda la capacidad que sea posible" para garantizar el agua en el Levante y el norte de Almería, porque, señala, en la cabecera del Tajo hay mil hectómetros cúbicos disponibles

Todas las cuencas andaluzas han mejorado bastante su situación tras las precipitaciones de las últimas semanas y la que ha experimentado una mejora más significativa con respecto a hace un año es la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir, que alcanza, a fecha de 1 de abril, el 43% de reserva cuando hace unos meses rozaba el 20%.

El resto de cuencas también han mejorado su aforo hasta este lunes, como la Mediterránea Andaluza, donde el agua embalsada ha alcanzado 316 hectómetros cúbicos, lo que representa el 27,3% de su capacidad, y la demarcación Guadalete-Barbate ha incrementado también su nivel hasta llegar el 27,1% de su capacidad.

Igualmente, ha avanzado en sus reservas la cuenca del Tinto-Odiel-Piedras-Chanza hasta el 43% de su capacidad de embalse con datos del pasado miércoles, por lo que presumiblemente estará por encima del 50 % con las lluvias de toda la semana pasada.