Fernando Faces
Perspectivas económicas: España 2025
La tormenta perfecta sigue su proceso natural y los efectos de la guerra en Ucrania empiezan a notarse, y mucho, en los bolsillos de los españoles. El aumento del precio de la energía y el combustible ha llevado a la huelga de transportes y después de cuatro jornadas de paro, y con los piquetes actuando en muchas zonas, empieza a percibirse la falta de productos frescos en los supermercados y el incremento ostensible de precio en algunos alimentos. Qué productos faltarán antes en los supermercados por la huelga de transportes. Aquí te lo contamos.
La huelga que arrancó el pasado lunes con escaso seguimiento e incidencia se ha convertido con el paso de las horas en un problema para la inmensa mayoría de provincias en Andalucía. Cualquier que haya ido al supermercado en las últimas horas ha podido percatarse de que muchas estanterías están ya vacías y sin síntomas de reposición inmediata. Ocurre sobre todo con las frutas, verduras, carne y pescado, ya que muchos pescadores ya no salen a faenar. Faltan productos frescos y, pese a que los supermercados recurren a un furgón propio para traer la mercancía sorteando piquetes, la situación cada vez es más tensa y las dificultades para llenar las estanterías apuntan a un desabastecimiento progresivo a la espera de que el Gobierno tome medidas.
Muchos no entienden el porqué de la huelga de transportes y cuánto podría extenderse. Los huelguistas no dejan que la mercancía llegue a las plataformas de distribución y centros mayoristas y el aprovisionamiento extraordinario de alimentos que se organizó en previsión de la huelga puede terminarse de cara a la próxima semana.
También existe el efecto del pánico en el consumidor, que se ha lanzado a comprar productos de forma exagerada, algo similar a los que ocurrió en los primeros días de la pandemia de coronavirus y contra lo que muchos supermercados luchan restando dramatismo a la situación o limitando la compra de algunos productos, como el aceite de girasol.
Azúcar, lentejas o harina son otros de los productos que empiezan a escasear y se teme que en próximos días puedan faltar en supermercados, aunque la mayoría de marcas garantizan que hay género en almacén para los próximos diez días.
Y por último nos encontramos con el problema de la leche y los productos lácteos. La industria láctea española paraliza su actividad desde este jueves como consecuencia de la huelga de transportes, según ha informado la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil), que integra a más de 60 empresas del sector y representa más el 95% de la producción nacional de productos lácteos.
Ante la falta de capacidad de envasado y almacenamiento de un alimento que es altamente perecedero la única solución es detener la producción para no malgastar sus recursos.
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