La ventana
Luis Carlos Peris
Reventa y colas para la traca final
Ha sido el tipo de trabajador que más ha crecido en 2022 y las nuevas bonificaciones impulsadas por el Gobierno para seguir relanzando el empleo en España vuelve a ponerles en el foco de la noticia. Según el Ministerio de la Seguridad Social en el último año los trabajadores fijos discontinuos pasaron de casi 400.000 personas de media a más de 800.000. Ahí es nada. Dos de cada diez nuevos indefinidos que se contrataron en 2022 fueron discontinuos y muchos se preguntan ahora si terminarán afectando a estos trabajadores.
Porque, a pesar de que el aumento de fijos discontinuos es el resultado de hacer más estable el trabajo estacional en España, históricamente la figura del fijo discontinuo ha traído seguridad pero también más empleo sumergido.
El fijo discontinuo es un contrato indefinido, aunque intermitente, es decir, que se trabaja en periodos determinados a lo largo del año, pero dispone de una estabilidad que le permite seguir avanzando en sus objetivos vitales y supone un gran avance en derechos laborales: pedir préstamos, tener vacaciones, poder acogerse a bajas por enfermedad, embarazos, maternidad/paternidad...En España, país con una economía muy dependiente de actividades estacionales, ligadas al turismo o la agricultura, ha sido históricamente muy utilizado, aunque en ocasiones resulta difícil contabilizar el número de casos, algo que ha podido influir en la escasa trasparencia a la hora de exhibir los datos en torno a dicha figura laboral.
El contrato es indefinido y, por tanto, la empresa está obligada a llamar al mismo trabajador para que ocupe dicho puesto tras el pertinente paréntesis, sin posibilidad de cambiar de cromos cada seis meses como solía hacerse con los contratos temporales.
Desde el punto de vista político este cambio de registro de temporal a fijo discontinuo está alimentando un debate que Yolanda Díaz asegura atajará en breve con el desglose de los datos de estos afiliados porque consideran que esa temporalidad, que generaba gravísimos problemas de funcionamiento y garantía de derechos, se ha corregido con el fijo discontinuo, por lo que ofrecer el dato de fijos discontinuos inactivos no mermará el crecimiento en la creación de empleo y el hecho de que el paro haya cerrado 2022 con la cifra más baja de desempleados desde el año 2007.
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