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La economía andaluza mantiene una mayor fortaleza que la española tras la guerra de Ucrania, según Unicaja Banco

Trabajadores de la construcción

La economía andaluza sigue mostrando una mayor fortaleza que la del conjunto de España incluso después de que la guerra de Ucrania haya cambiado radicalmente el contexto económico internacional, según resaltó ayer Analistas Económicos de Andalucía, el servicio de estudios del Grupo Unicaja Banco, que pone de manifiesto que en el primer trimestre del año el PIB regional, en términos interanuales, creció un 0,4% más que el nacional, aunque supone bastante menos que el 0,9% en el que aventajó en el conjunto de 2021.

En su informe Previsiones Económicas de Andalucía correspondiente al primer trimestre de 2022, los analistas de Unicaja Banco ponen de relieve que, más allá de la tragedia humana, la invasión de Ucrania por parte de Rusia va a tener "significativo impacto sobre la economía", cuya intensidad dependerá en gran medida de la evolución del conflicto bñelico.

Ese impacto será, según detallan, desigual por países. En el caso concreto de España, su economía podría estar menos expuesta que otras, al depender en menor medida del gas y petróleo rusos. Pero también está sometida a otros efectos novicos generales, como el fuerte aumento de los precios de las materias primas y la escasez de algunas de ellas, que "afectará a los distintos sectores de actividad, sin olvidar el impacto sobre la demanda de la elevada inflación o la incidencia sobre las exportaciones, y el turismo del menor dinamismo de los países de nuestro entorno", explican desde Analistas Económicos de Andalucía.

Andalucía tampoco escapa a las derivadas negativas de la invasión. El Producto Interior Bruto (PIB) andaluz creció un 2,7% en el cuarto trimestre de 2021, en torno a 0,4 puntos porcentuales más que en el trimestre anterior y que el conjunto de la economía española.

La fortaleza de la economía andaluza es aún mayor que la nacional en términos interanuales, ya que el crecimiento del PIB fue del 6,4% (5,5% en España), registrándose incrementos en todos los componentes de la demanda, más destacado en el caso de las exportaciones (28,1%), con un crecimiento del consumo privado (principal componente del PIB) por encima del 4%.

Por el lado de la oferta, Unicaja Banco destaca que el crecimiento del PIB obedece, sobre todo, al aumento del valor añadido en el sector servicios (7,9%) y la industria (6,0%). Por el contrario, la construcción registró un descenso del 1,0%, manteniéndose prácticamente estable el valor añadido en el sector agrario.

En el conjunto de 2021, Analistas Económicos enfatiza que la economía andaluza registró un crecimiento del 5,2%, una décima más que en España (5,1%). "Sólo la construcción y las actividades artísticas experimentaron un descenso respecto a 2020", señala la sociedad de estudios de Unicaja Banco que destaca que sí se incrementó el valor añadido en el resto de ramas productivas, con un crecimiento destacado (14,7%) del comercio, transporte y hostelería, las actividades que habían sufrido un mayor retroceso en 2020.

En cuanto a la demanda, los economistas de Unicaja Banco resltan el aumento de las exportaciones, cercano al 11%, por la mejora tanto de bienes como de servicios turísticos, así como del consumo de los hogares (5,2%).

Una vez declarada la guerra, según la información más reciente, relativa al primer trimestre de 2022, el PIB andaluz creció menos que el nacional, un 0,1% frente al 0,3% en España, lo que supone un 2,5% menos que en el cuarto trimestre de 2021, debido al descenso en el gasto en consumo de los hogares y en las exportaciones, aunque también la inversión ha crecido a menor ritmo.

Sin embargo, en términos interanuales, el crecimiento se ha situado en el 6,8% (6,4% en España), por lo que la economía ha mantenido la mauor fortaleza que mostraba a final de año y ha seguido ganando convergencia con el conjunto del país.

Por el lado de la demanda, destaca el crecimiento de las exportaciones (28,0%), en tanto que el consumo privado habría crecido casi un 3% y la inversión ha repuntado hasta el 5,3%.

El empleo sigue creciendo

En lo que respecta al mercado de trabajo, Analistas Económicos de Andalucía enfatiza que el empleo continuó mostrando un significativo ritmo de crecimiento en el tramo final de 2021, tanto en la Contabilidad Trimestral como en las de la EPA o la afiliación a la Seguridad Social, de forma que se habrían recuperado los niveles previos a la crisis sanitaria.

En el caso de los trabajadores afiliados a la Seguridad Social, en diciembre (3.253.950 trabajadores) se registraron casi 78.600 más que en 7 el mismo mes de 2019, contando la región con alrededor de 15.350 trabajadores en situación de ERTE. Esto supone un crecimiento en torno al 4% en términos interanuales (similar al promedio nacional), que se ha intensificado en los primeros meses de 2022 (5,1% en abril), si bien hay que recordar que al inicio de 2021 se registró la tercera ola de la pandemia.

Según la EPA, en el cuarto trimestre de 2021, el número de ocupados en Andalucía se situó en 3.249.800, aumentando en 102.300 personas respecto al trimestre anterior, lo que supuso un crecimiento en términos interanuales del 5,4% (4,3% en España). Por su parte, los datos del primer trimestre de 2022 reflejan un descenso de 32.000 ocupados respecto a finales de 2021, destacando la disminución en la industria y los servicios de mercado, mientras en la construcción se ha producido un aumento de cercano a las 4.500 personas.

En términos interanuales, el número de ocupados ha crecido un 5,4% (4,6% en España), debido al aumento en la construcción y los servicios. En cuanto al desempleo, el número de parados ha disminuido un 12,6%, al tiempo que la población activa ha crecido un 1,4%, lo que ha situado la tasa de paro en el 19,4% (13,6% en España), en torno a 3 p.p. por debajo de la registrada un año antes.

Previsiones para 2022

En lo que se refiere a las previsiones de crecimiento para Andalucía, las estimaciones de Analistas Económicos de Andalucía señalan que el PIB andaluz podría crecer en el conjunto de este año un 4,2%, una tasa similar a la media española y más de un punto inferior a la estimada hace tres meses. No obstante, la incertidumbre es muy elevada, especialmente en lo que respecta a la evolución del conflicto en Ucrania, pero también en relación a la trayectoria de los precios o los cuellos de botella en las cadenas de suministro, sin olvidar la evolución de la pandemia, por lo que la realización de proyecciones en estos momentos conlleva una elevada complejidad.

En cuanto al empleo, el número de ocupados EPA podría crecer un 1,5% en el promedio de 2022, hasta los casi 3,2 millones, alrededor de 1 p.p. menos de lo estimado hace tres meses. Por su parte, el número de parados podría disminuir en torno a un 2%, lo que situaría la tasa de paro en el 21,1%.

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