Andalucía aumenta el número de emprendedores pero también suben los abandonos

 Andalucía mejoró claramente en emprendimiento en 2023 respecto a 2022, con más personas iniciado una nueva actividad y un entorno más favorable, pero sigue lastrada por la tasa de abandono (que aumentó en este periodo) y por el escaso número de empresas que se consolidan. Además, tiene la asignatura pendiente del empleo: la mitad de los proyectos, tanto de reciente creación como consolidados, no tienen ningún trabajador asalariado y la tendencia va en aumento.

Estas son algunas de las conclusiones que se desprenden del Informe GEM Andalucía 2023/2024, una iniciativa del Globar Entrepreneurship Monitor (GEM), el observatorio sobre emprendimiento más destacado del mundo. Está formado por una red mundial de investigadores de 80 países vinculados a la actividad emprendedora. En Andalucía, el informe está impulsado por el Observatorio del Ecosistema Emprendedor de Andalucía y ha sido dirigido por Francisco Liñán, Inmaculada Jaén y José Fernández Serrano. La presentación en Sevilla, este jueves, ha contado con la presencia del consejero de Universidades, José Carlos Gómez Villamandos.

Lo más positivo es que la población general y la emprendedora observan cada vez más oportunidades para montar una empresa. En el caso de los que tienen ya un proyecto en marcha esta percepción ha pasado del 34% al 47% de los encuestados (la muestra es de 6.000 personas). Además, el miedo al fracaso baja significativamente, al pasar del 45% que admitían tenerlo en 2022 al 34%. Y, quizás lo más destacado, el 100% de las personas involucradas en el emprendimiento asegura poseer los conocimientos y habilidades para llevar a cabo su proyecto, lo que sitúa a nuestra comunidad como la primera de España en este ranking.

Esa mayor confianza en emprender se traduce en que los que desean hacerlo se eleven 2,4 puntos porcentuales, hasta el 12,7% del total, un porcentaje que supera a la media española del 11,7% y que registra un incremento significativo en la franja de edad de entre 45 y 54 años. También se elevan1,3 puntos los que han iniciado recientemente una actividad, hasta llegar al 6,9%, con un significativo aumento de los que tienen estudios secundarios o FP.

La encuesta incluye un apartado en el que se pregunta a los expertos y estos consideran que, ahora mismo, las condiciones del entorno andaluz son más favorables que las del conjunto de España. De los 13 indicadores que se analizan, 11 mejoran y destacan entre ellos el acceso a las infraestructuras (tanto físicas como de servicios) y la existencia de programas gubernamentales de apoyo a la actividad. Siguen siendo poco valorados, aunque mejoran, la educación emprendedora en la etapa escolar y la financiación.

Mayor tasa de abandono en Andalucía

La nota negativa es que esa mayor confianza para emprender no se traduce en un aumento de empresas consolidadas. En 2023, el 4,2% de los andaluces (aquí la encuesta se dirige a la población general) abandonaron su actividad, 1,3 puntos porcentuales más que en 2022 y por encima del promedio nacional (2,2%). Eso lleva a que las firmas ya establecidas disminuyan 1,1 puntos en comparación con 2022 y su tasa se sitúe en el 5,7%.

El informe destaca, también entre los aspectos que retroceden, el hecho de que el 52% de las iniciativas emprendedoras recientes no tenga empleados en 2023, frente al 37% de 2022. También las expectativas de creación de empleo son menores: el año pasado el 38% de los nuevos emprendedores no preveía tener empleados en cinco años cuando un año antes esta cifra estaba solo en el 18,8%, lo que refleja quizás un contexto económico más complicado.

El 8,3% de las nuevas iniciativas están vinculadas a la tecnología, 0,6 puntos menos que en el informe anterior, aunque suben las que están ligadas a la alta tecnología y bajan las de tecnología media. Y crecen las empresas recientes que exportan: el 33% de los nuevos emprendedores vendieron en el exterior, 5,8 puntos más que en el ejercicio anterior.

En comparación con el resto de comunidades autónomas Andalucía está bien colocada en percepción de oportunidades para emprender (la sexta), emprendedores potenciales (la tercera), emprendedores recientes (la sexta), conocimientos y habilidades (la primera), conocimiento de otros emprendedores (la tercera) y en miedo al fracaso (la once). Y está en mala posición en abandono empresarial (la segunda) y en empresas consolidadas (la 12). Por provincias, Málaga y Cádiz son las que tienen mayor dinamismo emprendedor y Huelva y Jaén, las que menos.

La inversión más frecuente para emprender, por último, se sitúa entre 4.501 y 6.000 euros, pero el 30% de los proyectos requiere de una inversión elevada. El 9,6% de más de 100.000 euros y el 18,1% de más de 30.000.