Rajoy confía en que el domingo sea la fecha del final de la crisis griega

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha confiado en que el domingo sea la fecha de cierre de la crisis griega, algo que ha dicho que, "como no puede ser de otra manera", se hará con pleno respeto a las reglas de juego de la Unión Europea.

Rajoy ha mostrado su esperanza en un acuerdo entre Grecia y las instituciones acreedoras tras participar en la cumbre de la eurozona que ha analizado la situación del país heleno tras el referéndum del pasado domingo y de la que ha dicho que salía "contento" y "satisfecho".

Una cumbre en la que el primer ministro griego, Alexis Tsipras, quien ha participado en la reunión sentado a la izquierda de Rajoy, se ha comprometido a presentar en las próximas horas un nuevo programa de rescate ante el Mecanismo de Estabilidad Financiera (MEDE) y antes del jueves la condicionalidad del mismo. La petición será analizada por el Eurogrupo el sábado y el domingo por un Consejo Europeo extraordinario.

De ahí la confianza de Rajoy en que sea en ese día cuando se pueda dar por cerrada la crisis de Grecia. "Espero y deseo fervientemente que esto quede liquidado el domingo y terminemos una situación de interinidad que no conducía a nada bueno, sobre todo para el conjunto del pueblo griego", ha subrayado Rajoy.

El presidente del Gobierno español no ha querido entrar a valorar si ha habido un cambio de actitud por parte de Tsipras porque ha dicho que lo que él tiene que hacer es colaborar "para que las cosas salgan bien". Pero sí ha reiterado que "se está haciendo lo que dicen las reglas de las instituciones europeas", algo que cree esencial para dar credibilidad, certidumbre y seguridad.

Rajoy ha lamentado asimismo que se haya perdido mucho tiempo para arreglar la situación difícil en que se encuentra el pueblo griego. El jefe del Ejecutivo ha explicado que en su intervención en la cumbre de hoy ha contrastado las buenas previsiones de crecimiento económico que tenía Grecia hace unos meses con las malas perspectivas que tiene en la actualidad, y ha subrayado que la deuda de Grecia, que antes era sostenible, ahora no lo es según el Fondo Monetario Internacional.

En consecuencia, ha instado al resto de líderes de la UE a actuar con rapidez debido a la situación "tremenda" en que se encuentra Grecia y a que la zona euro tampoco puede vivir en una situación de incertidumbre como la actual. En su intervención ha insistido en que es muy importante que se cumplan las reglas de juego porque afecta a la credibilidad de la eurozona y en que si Grecia quiere pedir un nuevo programa de rescate tiene derecho a hacerlo y el resto de socios lo van a considerar. Además, ha celebrado la decisión el Banco Central Europeo de garantizar la estabilidad financiera de la zona euro.

De forma previa a la reunión de los líderes de la eurozona ha habido otra del Eurogrupo en la que Grecia no presentó ninguna propuesta. Antes de participar en esa cita, el ministro de Economía español, Luis de Guindos, advirtió a Grecia de que estaba "en los últimos segundos" para poder lograr un acuerdo con las instituciones acreedoras y que "la pelota está en su campo" ante la propuesta que ha de plantear para que avancen las negociaciones. De Guindos rechazó que el punto más importante de la negociación sea una reestructuración de la deuda griega y consideró que lo esencial es que Grecia ponga en marcha las medidas que le permitan recuperar el crecimiento.

También a Bruselas viajó el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, para participar en la reunión previa a la cumbre de la eurozona que han mantenido los líderes del Partido Socialista Europeo. Sánchez consideró que "no hay excusa" para no lograr un acuerdo con Grecia y acusó a Rajoy de "irresponsable" por tener ante este país una "actitud amenazadora" con la salida del euro ya que cree que eso ha dejado a España sin voz para lograr una solución a la crisis griega.