Rajoy a la UE y al BCE antes del rescate: "La situación empeora aceleradamente"

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reclamó en una carta a los líderes de la UE mayor integración fiscal y bancaria, y una actuación "urgente" del Banco Central Europeo (BCE), ya que "la presión sobre muchos países está aumentando" de manera "acelerada" y el euro "está en riesgo". El texto está fechado el 6 de junio, tres días antes de que el Eurogrupo concediese una ayuda de hasta 100.000 millones de euros para sanear el sistema financiero español, cuyas dificultades no se mencionan en ningún momento en una misiva de cinco páginas, desvelada este miércoles por Rajoy en el Pleno del Congreso. Aquel día se esperaba que la entidad que preside Mario Draghi anunciase medidas para ayudar al sector financiero como las subastas de liquidez, y que bajara los tipos de interés por debajo del %, algo que no ocurrió. "La única institución que tiene hoy la capacidad para asegurar estas condiciones de estabilidad y liquidez que necesitamos es el BCE", defiende Mariano Rajoy en la carta que por el momento ha enviado al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y del Consejo de la UE, Herman van Rompuy.

De cara al próximo Consejo Europeo, el jefe del Ejecutivo español se muestra además favorable a un compromiso para la creación a medio plazo de una autoridad fiscal para orientar y armonizar estas políticas en la zona del euro, ejercer un control centralizado de las finanzas y ser la gestora de la deuda europea. En el ámbito bancario, considera necesario contar con una supervisión a nivel comunitario y un fondo de garantía de depósitos común. El presidente del Gobierno advierte de que el euro "está en riesgo" y este "futuro incierto" de la unión monetaria agrava la situación financiera "impidiendo que los ajustes tengan el efecto positivo que deberían tener". Además, dicha percepción se ha traducido, a su juicio, en una fragmentación del mercado financiero comunitario y de una "huida de liquidez" desde los países de la periferia al centro, una situación "insostenible, impredecible y que podría llevar el euro al límite", advierte.

En lo que se refiere a España, reitera su compromiso con los procesos de consolidación fiscal y del Programa de Estabilidad 2012-2015, y recuerda que cuenta con un "sólido respaldo democrático" para cumplir sus propósitos reformistas. Rajoy tiene previsto entregar esta misiva en la cumbre de los líderes de las cuatro primeras economías de la zona del euro que se celebrará el próximo día 22 de junio en la capital italiana.

"La ayuda la pagará la propia banca"

A lo largo de la sesión, Rajoy, ha celebrado que los socios europeos hayan apoyado la ayuda a la banca española,"fundamental y prioritaria", y ha subrayado que se trata de un crédito que pagará la propia banca. Asimismo ha justificado el crédito europeo porque España "en estos momentos" no dispone de esa cantidad que necesita el sistema financiero para sanearse, "ni puede emitir deuda pública" para obtenerla. "Estoy muy satisfecho, porque España no tiene en estos momentos esos 100.000 millones, ni, como sabe, puede emitir deuda pública", ha espetado Rajoy al líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en la sesión de control al Gobierno del Congreso de los Diputados. El jefe del Ejecutivo ha dejado claro que ha sido iniciativa del Gobierno español la obtención de este crédito. "Decían los socialistas que teníamos el mejor sistema financiero del mundo y ahora se ha demostrado que no lo tenemos y por eso hemos tenido que dirigirnos a la UE", ha dicho al respecto.

En 2009, cuando gobernaba el PSOE, el país sí hubiese podido cubrir estas necesidades a través de emisiones, "pero como teníamos el mejor sistema financiero del mundo no se hizo, y vamos con tres años de retraso respecto a los demás", ha lamentado con ironía el presidente. Así, ha destacado que en 2009 en el conjunto de la UE distintos países dedicaron 1,5 billones de euros "de su dinero" a ayudar a los bancos, y lo que ellos hicieron entonces con deuda pública "nosotros tenemos que hacerlo ahora con ayuda de la UE".

Rubalcaba propone una comisión de investigación y seguimiento a la ayuda

Por su parte, Rubalcaba ha defendido la creación de una comisión en el Congreso que "investigue a fondo y supervise" la ayuda de 100.000 millones -"el diablo está en los detalles", ha dicho- y que delimite las "responsabilidades políticas y económicas" de la actual situación. "No puede pretender que nos creamos que el espectáculo de Bankia no tiene ninguna influencia en lo que ha pasado", ha ejemplificado el portavoz socialista sobre lo que debería ser objeto de investigación parlamentaria.

Rajoy también ha respondido así a la pregunta del diputado de la Izquierda Plural Joan Coscubiela sobre por qué los ciudadanos tienen que pagar con sus derechos, salarios e impuestos una crisis provocada por el sistema financiero. Rajoy ha dicho que la crisis no tiene nada que ver con eso y ha ironizado al decirle que si no se aclaraba un poco más era difícil responderle. Asimismo, ha destacado que la ayuda europea a la banca española se debió hacer en 2009, cuando lo hicieron otros países de la UE. También ha resaltado que la crisis está provocada por la enorme deuda externa de las administraciones públicas, las familias, las empresas y las entidades financieras. Rajoy ha señalado que las administraciones gastaron en 2011 mucho más de lo ingresado -90.000 millones de euros- y que España adolece de falta de competitividad por no hacer reformas.

El presidente ha incidido en que el Gobierno trabaja para solucionar estos aspectos, que se ven agravados también por los problemas "muy importantes" de la zona del euro. Así, ha destacado las medidas del Gobierno encaminadas a reducir el déficit público, acompañadas de decisiones "duras" y "difíciles" de tomar y de reformas estructurales. Además, ha asegurado que se trabaja en la zona del euro para que vuelva la liquidez y para un proyecto de integración europea, "porque más Europa es la solución a buena parte de los problemas". El presidente ha resaltado que España está inmersa en un proceso de "desendeudamiento" de la economía que, en su opinión, lo están haciendo bien las familias y las empresas, y lo están empezando a hacer las administraciones.