El Observatorio Económico reafirma que Andalucía crecerá más que España en 2019
Sevilla/La economía andaluza está frenándose, al igual que la española, pero su mayor fortaleza hace que el Observatorio Económico de Andalucía (OEA) reafirmase este miércoles que la región recuperará la convergencia tras un largo ciclo de divergencia respecto al conjunto del Estado, algo que ya avanzó en su último informe.
El panel económico del OEA mantiuvo este miércoles la previsión de crecimiento de la economía andaluza en el 2,1% del PIB para 2019, anquneu enfatizó que “se acentúan los signos de desaceleración” económica, según explicó el presidente del OEA, Francisco Ferraro.
Prueba de que la economía andaluza está frenando, las previsiones del Observatorio pusieron este miércoles de manifiesto que en el tercer trimestre creció un 0,4%, una décima menos que en el segundo, e igualó la media de España, aunque habrá convergencia porque la tasa interanual se sitúa en el 2,1%, que supera en una décima el del ámbito nacional.
Este freno en el crecimiento del PIB andaluz hará que en 2020 el avance de la región se reduzca a un 1,6%. Ferraro, no obstante, descartó que esta desaceleración lleve a una recesión el próximo año.
Según los indicadores económicos y pese a que se refleja en el tercer trimestre un freno en la actividad, Andalucía mantiene una “ligera fortaleza” respecto a España debido, según el presidente del OEA, al dinamismo del consumo interno que está impulsado por el aumento del empleo y el crecimiento de los salarios.
El consumo de los no residentes o de los turistas que llegan a Andalucía aún tiene una evolución positiva, sobre todo por un fuerte aumento del turismo nacional, aunque con menor intensidad que en trimestres previos.
Además, las actividades más estrechamente relacionadas con el consumo de los residentes andaluces sí registran crecimientos significativos de la afiliación en relación con el mismo trimestre del año anterior, como la hostelería (5,5%) o los transportes (5,1%), por encima de los correspondientes a la media de España.
Los signos más claros del freno económico se reflejan en indicadores como la bajada en la matriculación de los vehículos en un 13 % en el tercer trimestre, en la disminución de las hipotecas sobre viviendas en un 6 % y en la bajada en un 5 % en la compraventa de vivienda, así como en la reducción del índice de confianza empresarial en un 3,3 %. Retrocede también la inversión, pero destaca el aumento de la compraventa de solares (0,6%), frente a la disminución en España.
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