La Junta de Andalucía aprueba la reforma fiscal que elimina el impuesto de Patrimonio

El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha aprobado la reforma fiscal anunciada por el presidente andaluz, Juanma Moreno, en el Foro Joly. Una revolución impositiva que afectará a los tramos autonómicos del IRPF, impuesto sobre el Patrimonio y canon del agua y con la que los contribuyentes se ahorrarán 360 millones de euros.

La primera medida a aplicar será la deflactación de los tres primeros tramos del IRPF en un 4,3%, incluido el mínimo exento, por lo que afectará a todos los ciudadanos. El objetivo de esta medida es que los incrementos salariales que se produzcan para compensar la inflación no se vean penalizados por el impuesto de la renta.

El impuesto del Patrimonio quedará bonificado al 100%, no se pagará por tanto en la comunidad. En el último ejercicio, de los 20 contribuyentes que más pagaban en Andalucía, 10 se marcharon fuera de la región. Se dejaron de cobrar 3,5 millones de euros, y otros 14 millones de euros por el IRPF de los mismos. La teoría que defiende Juanma Moreno es que la recaudación aumentará cuando se suprima este impuesto, porque no se irán más contribuyentes y, lo que es más importante, habrá nuevas domiciliaciones en la comunidad.

Cerca de 17.000 personas -16.785 personas en 2020- realizan en Andalucía la declaración de Patrimonio, aquellas obligadas a presentarla si los bienes poseídos tienen un valor superior a los 700.000 euros.

El otro impuesto que desaparece es el canon del agua, que pagan todos los andaluces a través del recibo. El dinero de este canon está destinado a mejorar las infraestructuras hidráulicas, pero a la Junta se le han acumulado cantidades millonarias sin invertir.