Fernando Faces
Perspectivas económicas: España 2025
COSENTINO, que tiene más de dos tercios de su facturación en el extranjero, con una fuerte componente en Estados Unidos, va a celebrar el lunes un acto muy americano en Cantoria, su cuartel general cercano a Macael (Almería). Allí no se puede decir que esté su fábrica en singular, sino un parque industrial con media docena de plantas en donde se produce entre otras cosas el Silestone que se instala en todo el mundo y se exporta por los puertos de Valencia, Alicante, Cartagena y Algeciras, por este orden. También en Cantoria se fabrica la piedra natural del grupo y en Vitoria (Brasil) todo el material de granito.
El acto del lunes consistirá en la presentación del plan estratégico de la compañía para el periodo de 2011 a 2013, una iniciativa poco común en las empresas andaluzas. En 2010, Cosentino facturó 365 millones de euros, más del 70% en el extranjero. En 2013 pretende que el volumen de su exportación suba al 83%.
El patrón del grupo, Francisco Martínez Cosentino, explicará sus proyectos de inversión, innovación, exportación, nuevos mercados y productos, a la prensa nacional, regional y local. Los asistentes podrán, de camino, ver cómo trabajan las máquinas en el movimiento de tierras de medio millón de metros cuadrados para la ampliación del complejo industrial de Cantoria, que va a pasar de 450.000 a un millón de metros cuadrados y de seis a once fábricas.
También Abengoa, que hace pocos días presentó sus resultados de 2010, tiene un 74% de su facturación en el extranjero. La multinacional sevillana, presidida por Felipe Benjumea, hizo una cifra de negocio de 5.566 millones el pasado ejercicio, y ha anunciado esta semana que el consorcio Shams Power Company, en el que participa con un 20%, ha cerrado la financiación de una de las mayores plantas termosolares del mundo y la primera de su tipo en Oriente Medio.
La operación se ha cerrado por un importe de 600 millones de dólares, y en la financiación participan diez entidades financieras árabes, europeas y japonesas. El consorcio está integrado por Masdar (60%), Total (20%) y Abengoa (20%). Esta sociedad desarrollará, construirá, operará y mantendrá una planta, situada en Madinat Zayed, aproximadamente a 120 kilómetros al suroeste de Abu Dhabi, en los Emiratos Árabes Unidos.
La construcción de esa planta termosolar se enmarca en la estrategia de Abu Dhabi de conseguir para 2020 que el 7% de su producción de energía provenga de fuentes renovables. Shams 1 será una de las mayores plantas termosolares del mundo, con un campo solar de 768 colectores cilindroparabólicos. Ocupará una superficie de 2,5 kilómetros cuadrados, y tendrá una capacidad de 100 megavatios. La construcción comenzó en el tercer trimestre de 2010 y está previsto que comience a operar en dos años. Utiliza la tecnología de última generación de Abengoa.
El socio principal de esta operación es Masdar, filial de la compañía Mubala Devlopement Company, el instrumento de inversión del Gobierno de Abu Dhabi. Masdar se ocupará de desarrollar las energías renovables en los Emiratos y Mubadala impulsa la diversificación de la economía de Abu Dhabi.
La estrategia del Gobierno de Abu Dhabi es que Mubadala se asocie con grandes compañías internacionales para proyectos a largo plazo y aliente la diversificación de la economía del país. Además de los de energía, gestiona una cartera de proyectos de inversión multimillonarios a nivel local, regional e internacional. Y trabaja con multinacionales líderes en un amplio abanico de sectores industriales, como aeroespacial, energía, salud, información y comunicaciones, tecnología, infraestructura, inmobiliario, hostelería y riesgos.
Una tercera empresa andaluza con gran proyección internacional es Mayoral. La compañía malagueña presidida por Rafael Domínguez de Gor facturó el año pasado 210 millones, con un 63% fuera de España. Su previsión para este ejercicio es llegar a una cifra de negocio de 240 millones y fuentes de la compañía consideran que, en un par de años, el volumen de sus exportaciones puede alcanzar el 70% de su facturación. Sobre todo si tiene éxito una de las últimas apuestas de la compañía: Mayoral USA Inc, con sede en Miami, desde donde prentende introducir sus prendas en establecimientos multimarca de Estados Unidos.
Mayoral también tiene internacionalizada la mayor parte de la confección de sus productos textiles en India, Vietnam, China, Turquía, Marruecos y Portugal. Aunque todavía produce el 10% en Andalucía. La firma malagueña tiene 89 tiendas propias y 28 franquiciadas en España, 117 en total, un tercio de las cuales están en la región andaluza. Su último hallazgo ha sido la ropa de recién nacidos y la línea de artículos textiles de puericultura que inició hace tres años y ya representa el 12% de su facturación.
La exportación de servicios de las universidades andaluzas va bien, pero se ha ralentizado su evolución por la crisis. En las cifras facilitadas por la Secretaría de Universidades de la Junta, cuyo titular es Francisco Trigueros, no se desglosan las facturas de las oficinas de transferencia de investigación por contratos con empresas de otros ingresos ordinarios, como la formación continua, cursos de posgrado, jornadas y congresos, museos, exposiciones y espectáculos, y otras prestaciones de servicios.
En todo caso, en conjunto, las universidades andaluzas ingresaron 19,7 millones de euros en 2002 por prestación de servicios, 26,1 millones en 2003, 27,4 millones en 2004, 47,2 millones en 2005, 62,8 millones en 2006, 78,5 millones en 2007, 80,8 millones en 2008, y 80,6 millones en 2009. El salto a mitad de la década fue muy notable, pero se estancó el crecimiento con la llegada de la crisis.
La crisis está dejando en evidencia al sector de las cajas de ahorro, cuya confederación preside Isidro Fainé. El Banco de España ha establecido necesidades de capitalización para ocho cajas por valor de 14.077 millones de euros. Entre ellas, Banca Cívica, de la que forma parte Cajasol, necesita 847 millones, y Mare Nostrum, de la que es socio Cajagranada, requiere 637 millones. En una reciente gira asiática de altos cargos de la CECA se les ha explicado a los enviados especiales que la resistencia a invertir no era por la viabilidad de estas entidades financieras, sino por el riesgo del país. En todo caso, la exportación de nuestros servicios financieros no va a ser tan fácil.
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