El BCE exige por carta a Italia privatizaciones y una reforma laboral
Indignación en la oposición ante lo que se considera una injerencia exterior que desacredita aún más a Berlusconi
Una "carta secreta", firmada por el gobernador del Banco Central Europeo (BCE) y enviada al jefe del Gobierno italiano Silvio Berlusconi, en la que se dictan las medidas para salir de la crisis, generó ayer polémica en Italia, que se siente bajo el control de poderes extranjeros. La carta, según reveló ayer el diario Il Corriere della Sera, impone condiciones a Italia a cambio del apoyo del BCE, que exigió un gesto para entrar a comprar deuda italiana, principal objetivo de los especuladores.
La carta es un "programa de gobierno", sostiene el diario, debido a que fija el calendario para la aplicación de las medidas e incluso menciona "los instrumentos legislativos que se deben utilizar" para acelerar su puesta en funcionamiento.
Il Corriere sostiene que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, presionan para que Italia adopte inmediatamente las medidas anunciadas el viernes para acelerar el ajuste fiscal comprometiéndose a alcanzar el equilibrio de las cuentas en 2013, un año antes de lo previsto y tras una reforma de la Constitución. Entre las exigencias, siempre según el diario, figuran las privatizaciones e iniciar una reforma del mercado laboral.
La oposición exigió explicaciones. "¿Qué nos piden realmente el BCE y las instituciones internacionales? Un gobierno impotente totalmente desacreditado y ahora bajo tutela debe al menos decir cuál es la situación real", exigió el jefe del Partido Demócrata (PD, de izquierda), Pierluigi Bersani.
"El Gobierno y la mayoría conservadora italiana (...) aceptaron estos días un gobierno técnico por encima de la nación, que se podría calificar de partidario de los mercados", escribió en un editorial Mario Monti, ex comisario europeo y actual rector de la prestigiosa universidad milanese Bocconi."Los ministros siguen en sus carteras pero las decisiones claves las toma el gobierno supranacional", resumió.
Las propuestas del BCE, que llega a sugerir que se reforme el mercado del trabajo italiano y entra ampliamente en detalles, pidiendo la modificación del modelo basado en la extrema flexibilidad de los jóvenes y precarios, fueron aceptadas por el principal aliado del gobierno, la Liga Norte.
Mañana miércoles, el Gobierno italiano se reunirá con los actores sociales y expondrá un día después las nuevas medidas económicas ante el Parlamento, excepcionalmente abierto en pleno agosto, temporada de vacaciones en Europa.
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