Ángel Camacho calcula la huella de carbono de sus aceitunas y mermeladas
La empresa sevillana agroalimentaria Ángel Camacho Alimentación, fabricante de las aceitunas Fragata y las mermeladas La Vieja Fábrica, ha sido la primera del mundo en calcular y verificar la huella de carbono de aceitunas y mermeladas. Empleando metodologías basadas en estándares internacionales de medición, la empresa ha logrado identificar la cantidad de gases de efecto invernadero liberados a la atmósfera en todas las actividades que abarcan el ciclo de vida de las aceitunas de mesa y mermeladas, desde la adquisición de las materias primas hasta su gestión final como residuo.
La empresa ha realizado dicho cálculo para obtener información de los principales consumos energéticos en todos los procesos desde la recolección de frutos, transportes, materias primas, fabricación y distribución, entre otras, según informa en un comunicado.
"Estos indicadores son una excelente herramienta de análisis para valorar el impacto real de nuestro negocio y nos permiten desarrollar medidas de ahorro dentro del plan de reducción del consumo energético de la compañía basados en el uso de una energía eficiente", explica Pedro Cruces, director de Ingeniería y Medio Ambiente de la empresa. Estas medidas de ahorro se traducen en reducciones de las emisiones de gases de efecto invernadero y por tanto de la Huella de Carbono de sus productos.
La política de reducción de consumo energético de Ángel Camacho Alimentación ya ha permitido logros como la reducción del 15% en el consumo eléctrico y la sustitución de combustibles como el gasóleo por biomasa producida a partir del hueso de sus aceitunas.
Los resultados obtenidos mediante el cálculo de su huella han permitido implantar nuevas acciones en esta política de ahorro que la hará aún más efectiva en la reducción de emisiones de los gases de efecto invernadero.
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