Andalusí beverages: la destilación innovadora

Basilio Rodríguez, director de Marketing:; Elena Rodríguez, directora de Personal y de Calidad, y José Antonio Rodríguez, director de Producción

Andalusí Beverages fue creada en 2015 por José Antonio Rodríguez, uno de los fundadores de la exitosa ginebra Puerto de Indias. También es una destilería, pero quizás hasta ahí llegue su parecido. Sus productos van dirigidos a otro nicho de mercado, como afirma Basilio Rodríguez, hijo de José Antonio y director de marketing de la firma. "Dentro del mercado de la ginebra hay muchas categorías y la vertiente que nosotros desarrollamos está al margen de la categoría de sabor dulce e que representa Puerto de Indias", afirma. Y añade: "No buscamos un sabor en concreto, sino un concepto a partir de muchos ingredientes, un sabor complejo". Y lo mismo que hablamos de ginebra lo hacemos de vodka o de cócteles, las otras líneas de productos con los que trabaja Andalusí Beverages.

Su crecimiento ha sido constante, con lanzamientos de productos nuevos (e innovadores) casi cada año. Llegó a facturar 1,9 millones en 2019 y 2020 iba a ser el año del gran despegue. En marzo tenían 30.000 botellas ya en preventa, pero todo se vino abajo y en cuatro días se anularon. Pese a ello, la empresa no cejó en sus planes de lanzar nuevos productos. La marca de ginebra Obsession Gin, que ya existía desde 2017, fue remodelada con un sabor clásico, otro de frutos rojos y la purple, con la mora como uno de sus ingredientes. Pese a las restricciones a la hostelería -que han hecho que se reduzcan las ventas entre un 50% y un 75%- de ginebras como la de moras se han llegado a vender 25.000 botellas.

Un experto ruso dio el visto bueno a los vodkas

Lo primero que lanzó Andalusí Beverages fueron vodkas. "Nos ayudó un experto en vodka ruso, amigo de la familia. Hicimos muchas pruebas, hasta que los productos cumplieron el mínimo para poder decir que eran verdaderos vodkas". En el portfolio hay ya varios sabores, y, aparte de los clásicos, triunfa el vodka de lima y el temptation de manzana. El gran éxito de la empresa es, en cualquier caso, un licor (de vodka), el spicy fresh, del que se vendían ante de la pandemia 45.000 botellas al año. Por otro lado, hace dos meses Andalusí Beverages creó su propia tienda 'on line', que usa no solo para vender (no deja de crecer) sino también como termómetros de tendencias de consumo. Y, además, ya cuenta con una red comercial con ocho trabajadores, que prevé ampliar, y exporta a Reino Unido, Portugal y China (en Shangai está su principal cliente exterior de Ginebra), y ya hay propuestas de EEUU, Sudamérica, Sudáfrica y otros países de Asia.

Además, según señala Rodríguez, Andalusí Beverage ha aprovechado para lanzar este mismo año -y aún en plena pandemia- tres nuevos productos, englobados en el concepto de cremas andalusíes: la crema de torrija, la de chocolate brownie y la de arroz con leche. "Dentro de lo malo, la Covid nos ha permitido dedicarle mucho tiempo a nuevos proyectos y ahora lo que queremos es estar lo mejor posicionados posible para cuando se acabe la pandemia tener la mejor artillería para comercializar", dice Basilio Rodríguez.

Andalusí Beverages tiene su principal fábrica en El Viso del Alcor (Sevilla), con una capacidad de producción de cinco millones de botellas al año. "Estamos muy por debajo de los niveles óptimos, la máquina corre mucho más que nosotros", afirma Rodríguez, que se conforma con entre 100.000 y 150.000 botellas cuando la pandemia toque a su fin. En El Viso se producen los vodkas, ginebras y cócteles, y, además, hay otra pequeña fábrica artesanal en Carmona que destila el Anís Los Hermanos, una marca de 141 años muy arraigada en la zona de Los Alcores.

En la fábrica de El Viso han llegado a trabajar en la prepandemia hasta 35 personas en momentos de pico de campaña, aunque en la normalidad son entre 12 y 14. No sólo se enfocan a la destilación. El 50% de la facturación de Andalusí Beverages viene de hacer estuches, cajas y regalos para otras marcas, entre ellas la propia Puerto de Indias.

De cara al futuro, el objetivo no es alcanzar cifras macro excesivamente grandes, ya que estamos ante una empresa de nichos. En cualquier caso, Rodríguez espera llegar a 1,5-2 millones de botellas y a entre cuatro y ocho millones de euros en ventas en dos años, con hasta 15 referencias. "No queremos el bombazo de un producto, sino de poner en valor productos muy concretos con volúmenes muy estables", concluye Basilio Rodríguez.