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Paro y afiliación a la Seguridad Social
Tiene su punto de ironía que las dos comunidades autónomas que más han sufrido la destrucción de empleo en abril sean dos de las que menos han sufrido la incidencia del Covid-19.
Efectivamente, Canarias lidera la destrucción de empleo en términos relativos (en porcentaje) en España, con un descenso del 4,87%. Inmediatamente detrás va a Andalucía (-4,07%), que, dado su volumen de población, encabeza el ránking en términos absolutos: 123.259 afiliados menos a la Seguridad Social, y sin contar a los afectados por ERTE, que siguen siendo contabilizados como ocupados. Es la única región que supera los 100.000 empleos perdidos, y siete provincias están en el top ten del ranking de mayores caídas en porcentaje: todas menos Huelva. La triste clasificación está liderada por Málaga, con un descenso del 4,85% en el número de afiliados, el mayor a nivel nacional.
La caída de abril es mayor que la de marzo, que fue de 54.098 personas, pero es más suave que la de la segunda quincena de marzo. Entre el 12 y el 31 de ese mes se destruyeron 209.818 empleos en la región, que, sumados a los 123.259 de media en abril, dan la terrorífica cifra de 333.077. Es verdad que esos 333.077 afiliados perdidos reflejan una circunstancia engañosa: el parón de los servicios no esenciales durante dos semanas en abril. Por eso es más fiable la afiliación diaria (no la media del mes), que refleja que los cotizantes a fecha 31 de marzo son más que los que había a 30 de abril: se ganan incluso 4.419. Con lo cual la crisis del Covid se habría quedado, de momento, en el dato de marzo, tras un mes de abril en forma de V en los sectores no esenciales: bajón fuerte a mitad de mes para recuperarse después.
Aún así, los más de 200.000 empleos perdidos siguen siendo un dato bastante terrorífico.Y esa circunstancia queda reflejada en que unos pocos meses Andalucía pasa de récord de afiliación a bajar de nuevo de los tres millones de cotizantes medios, hasta situar la cifra en 2.961.458.
En lo que se refiere al paro, el alza en Andalucía es de 32.964, del 3,49%, con lo que se suaviza mucho el incremento brutal de marzo, de 138.569. Esto tiene una explicación: en marzo el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) incluyó en la estadística a los afectados por ERTE y ahora, en abril, por decirlo de algún modo, se limpia la estadística. Para tener un dato fiable, pues, hay que sumar marzo y abril: 171.533 parados más en los dos meses, un incremento del 21,2%, superior a la media nacional del 18,03%. Dado el alto número de parados andaluces en relación con el resto de España, resulta que el 29% de los desempleados por el coronavirus, tres de cada diez, vienen de la región.
Y ello sin contar a los afectados por ERTE. Estos suman 477.392 a 30 de abril, 446.124 por fuerza mayor y 31.268 por causas productivas. Los nuevos parados y los afectados por esta circunstancia son 648.925, una cifra espectacular.
A nivel nacional, la Seguridad Social perdió 947.896 afiliados desde que comenzó la crisis, hasta 18,39 millones de cotizantes, después de que en abril se destruyeran 49.074 a cierre de mes (afiliación diaria) y se registrara un descenso medio de 548.093 ocupados con respecto a marzo.
Por otro lado, el paro registrado experimentó un fuerte incremento en abril con 282.891 desempleados, hasta alcanzar los 3,83 millones de personas.
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