Abengoa lleva a su junta de accionistas medidas que le den la liquidez para ser viable

Sevilla/La nueva Abengoa vive un momento muy delicado. Tras arrojar pérdidas por casi 1.500 millones de euros en el ejercicio de 2018, la multinacional andaluza reconoció en la información financiera que trasladó a la#Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que “la normalización de la actividad tras el proceso de reestructuración financiera concluido en marzo de 2017, ha sido más lenta de lo esperado y, por tanto, para asegurar la viabilidad” del grupo Abengoa “a corto y medio plazo y poder continuar con su actividad de forma competitiva y sostenible en el futuro” necesita dotarse de liquidez mediante varias medidas, ya avanzadas también en su plan de viabilidad para el próximo decenio.

Esas mismas medidas las incluyó ayer en el orden del día de la junta general de accionistas que convocó para el día 27 de marzo de 2019, a mediodía, en primera convocatoria y, en su caso, de no alcanzarse el quórum necesario, en segunda convocatoria, al día siguiente a la misma hora.

En concreto, el consejo de administración de la multinacional con sede en Sevilla propone la aprobación, “en el marco de la operación de reestructuración de la deuda del grupo Abengoa, de varias emisiones de bonos convertibles por parte de determinadas sociedades del grupo distintas de Abengoa, S.A.”, la matriz del mismo, así como el otorgamiento y ratificación de garantías.

Como se ha explicado en otras ocasiones la reestructuración se plantea tres retos a resolver. En primer lugar, obtener hasta 97 millones de euros de nueva liquidez a través de la emisión de un bono convertible –al 9% de interés– para refinanciar el proyecto A3T. El desembolso inicial sería de 30 millones de euros y el resto quedaría condicionado al cumplimiento de ciertos hitos.

En segundo lugar la operación busca obtener 140 millones en nuevas líneas de avales, 15 de esos millones se utilizarán para proyectos en España.

Y tercer lugar, modificar la estructura del capital, de manera que haya una reducción significativa de la deuda financiera en el medio plazo, aunque respetando el orden de prelación actual de los acreedores. El objetivo es que el capital resultante con la reestructuración sea sostenible con el negocio futuro de ingeniería y construcción.

Además de los asuntos relacionados con la obtención de liquidez mediante nuevo dinero y avales, a la junta también se le plantea una nueva política de remuneración para un grupo de directivos, hasta 25, incluyendo en el mismo al presidente ejecutivo, Gonzalo Urquijo.

El objetivo es, según consta en la información remitida al por el consejo de Abengoa a la CNMV, que se valide un nuevo plan de incentivos a largo plazo para los años 2019-2024 con la creación de valor para vincular la parte variable de su remuneración al cumplimiento de su plan estratégico para dicho periodo.

En el caso de Urquijo, de cumplirse tales requisitos y condiciones, recibirá un importe máximo de 1.630.000 acciones Clase A de Abengoa S. A. Este número de acciones al valor de cierre de la Bolsa de ayer, 0,024 euros, asciende a 39.120 euros. Y, en segundo lugar, y por cuenta de la sociedad creada en la reestructuración Abenewco1, un importe máximo de aproximadamente el 20% del importe devengado.