Las obras de la Universidad Loyola arrancan en Entrenúcleos

Con más de cuatro años de retraso sobre la fecha inicial que se dio cuando la Universidad Loyola Andalucía y el Ayuntamiento de Dos Hermanas firmaron el convenio para que se asentara en el municipio, ayer arrancaron las obras del campus. Durarán 18 meses, para que pueda estrenarse en septiembre de 2019, según se anunció en la colocación y bendición por parte de la arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, de la primera piedra. La inversión en esta fase rondará los 40 millones de euros en uno de los dos ejes con los que contará el complejo: irán las aulas, los espacios comunes y deportivos. Para la segunda fase se dejan la biblioteca y la capilla.

Pero, más allá de un proyecto conocido y esperado, la obra supone un hito para esta zona, Entrenúcleos, 750 hectáreas entre el casco principal y Montequinto y la apuesta del alcalde, Francisco Toscano, al sur del área metropolitana. La zona quedó urbanizada pero sin construcciones durante la crisis. La Universidad Loyola es la primera empresa que se asienta en la parte del Parque Tecnológico (50 hectáreas) en la que sólo hay ahora un edificio municipal. "Supone generar confianza en una ciudad y para los que pensaban invertir en este territorio", admitió el regidor, que espera nuevos proyectos tecnológicos y relacionados con la sociedad del conocimiento. En las 300 hectáreas que rodean al campus hay sitio para unas 20.000 viviendas: 1.300 están construidas y habitadas; más de 700 están en obras o a punto de iniciarse; y unas 2.000, en estudio.

Toscano avanzó que sigue en contacto con la Junta para avanzar en el proyecto de autobús lanzadera que usará la plataforma para el tranvía desde la parada del Metro en Montequinto, que debe conectar la Loyola. El Ayuntamiento contempla incluir un vehículo para ese servicio en el próximo concurso para la renovación del transporte público nazareno.

El Campus de la Loyola prevé arracar con 2.200 alumnos y más de 200 puestos de trabajo de "alta calidad" y "conocimiento". El arquitecto, Luis Vidal, destacó que el campus se convertirá en un "referente" en accesibilidad, sostenibilidad, tecnología e integración con el entorno. "Un campus 5-G", resumió. La Loyola aunará en este campus las clases y los servicios que ahora imparte también en Palmas Altas.