El tapado es Fidel

Pepe Mel y Vlada Stosic, que en estas fechas van dejando de ser enemigos irreconciliables, parecen haber tomado ejemplo del entrenador del eterno rival, Unai Emery, y cada día que pasa es más normal viéndolos en todos los campos de la geografía española. Cierto es que ni el competente entrenador verdiblanco ni el director deportivo han dejado nunca de seguir la actualidad futbolística, pero tampoco lo es que el mercado ha llegado a un punto que las gestiones hay que atarlas cuanto antes.

Ítem más: en el Betis se prevé una desbandada en verano que puede ser de órdago y cuanto antes se vayan poniendo los parches, mejor. Incluso si previsibles heridas como las de Campbell, Juan Carlos o Pabón aún no han aparecido.

Así, hace dos semanas se pudo ver a este matrimonio, para algunos de conveniencia, pero que funciona, observando en las gradas del Nuevo Colombino el partido que disputaron el Recreativo y el Real Madrid Castilla. En ambos equipos militan futbolistas interesantes para el Betis, como el ya fichado por tres años Juanfran (el contrato entre las partes ya está firmado, aunque no se hará oficial posiblemente hasta el 30 de junio), o Chuli, el delantero recreativista y uno de los más prometedores de la categoría de plata. Es más, sus cualidades se asemejan considerablemente a las de Rubén Castro y Pabón, justo el tipo de delantero que funciona en el Betis desde hace años, más allá de otros más estáticos y que hallan su excepción en Jorge Molina.

Eso ocurrió la semana pasada. Y con Juanfran ya en la buchaca, Mel y Stosic aprovecharon la visita del Betis al Santiago Bernabéu para permanecer un día más en Madrid y visitar el cercano estadio Santo Domingo, donde a mediodía del domingo se midieron los dos equipos revelación de la categoría, el sorprendente Elche, que ya tiene el ascenso casi en el bolsillo, y el Alcorcón, que tras su victoria sigue tercero y con serias opciones de ascenso directo o, cuando menos, de disputar la promoción.

Mucho se ha hablado y escrito de ese partido, pero principalmente de tres futbolistas, los ilicitanos Etxeita, un central de garantías que tiene de nuevo un pie en el Athletic, y Xumetra, un extremo que queda libre el 30 de junio y al que el Betis ya echase el ojo incluso antes de ser fichado por el Elche del Girona. Tampoco fue obviado el nuevo tanque del Alcorcón Oriol Riera, sustituto de Quini en el conjunto madrileño. Criado en la cantera del Barça y tras pasar por el Celta y el Córdoba, se ha destapado esta temporada y es uno de los arietes más reputados de Segunda.

Pero el Betis busca otra cosa. Aunque Mel en su día fue muy partidario de Santa Cruz para alternarlo con Jorge Molina, hoy prefiere un punta distinto que pueda jugar con el alcoyano o formar pareja con Rubén Castro. Es lo que ha colegido tras la exitosa apuesta por Pabón. Por eso encaja más Chuli, siempre que la apuesta sea de segunda mano y no de tirar la casa por la ventana, algo que podría ocurrir si mediase un traspaso de Beñat.

Con todo, en el citado partido entre el Alcorcón y el Elche sí hubo dos futbolistas seriamente escrutados por los cualificados emisarios béticos. El primero de ellos es el extremo izquierdo onubense Fidel, titular indiscutible con Fran Escribá en el Elche y que está cuajando una excelente temporada. El único problema, a diferencia de Xumetra, es que no queda libre, pero se trata de un futbolista de un perfil superior. El segundo es el guardameta Manu Herrera, que ha echado el cerrojo en la portería ilicitana y que no es descartable para un Betis que se va a ver en la obligación de firmar a dos guardametas este verano porque la renovación de Adrián está parada y Fabricio y Casto saldrán. Si Manu Herrera puede, al menos, competir con otro de superior categoría es lo que Mel y Stosic están pensando en estos momentos.

Sea como fuere, el mercado de Segunda División no es el prioritario del Betis para reforzarse de cara a la siguiente temporada, aunque sí ha seguido el club a numerosos futbolistas. El ya firmado Juanfran, Chuli, Fidel y, quizá, Manu Herrera son los candidatos. El resto, futbolistas seguidos y que entran en los partidos de esta singular pareja Mel-Stosic.