Las sevillanas Belén Rodríguez y Marta Regordán, campeonas del mundo juvenil en China

Sevilla/La selección española de balonmano sub-18 se ha proclamado este domingo por primera vez en su historia campeona del mundo gracias a un emocionante y ajustado triunfo en la final ante Dinamarca por 23-22 al final de los 60 minutos reglamentarios. Entre el grupo de campeonas dirigido por la entrenadora Cristina Cabeza que ha viajado a China para la celebración del campeonato se encuentran las sevillanas Belén Rodríguez y Marta Regordán, sendas jugadoras del BM Montequinto hasta esta temporada (desembarcarán en el BM Granollers y Costa del Sol respectivamente) y cuyo desempeño en el torneo ha sido fundamental para obtener el ansiado oro mundial.

El papel de la hispalenses en el apartado ofensivo no sólo en la final, sino en semifinales ante Hungría (19-16), ha sido de gran ayuda para la consecución de un título que se le resistía a nuestro país desde su primera edición en 2006.

En contraposición con la decepción que supuso la prematura y decepcionante eliminación de la selección absoluta en los Juegos Olímpicos de París, donde las Guerreras no sumaron ninguna victoria, emana con fuerza desde abajo esta generación dorada, provista de grandes capacidades defensivas, pero especialmente de un gran arsenal de recursos ofensivos y facilidad para la anotación por medio de la creatividad.

Para quitarse el sombrero

El combinado patrio llegaba a la final celebrada en el Chuzhou International Handball Hall de China con una estadística inmaculada. Pleno de victorias en las rondas previas: los tres de la ronda preliminar y los tres de la ronda principal antes de ganar a Japón y a Hungría en semifinales, para acabar culminando su obra ante Dinamarca, dos veces campeona en este evento.

Y eso que España se tambaleó en algunos minutos de la primera mitad gracias al acierto de las danesas en ataque y el muro de Foneca Nielsen, que llegó al 50% de paradas. Hasta que comenzó a aparecer el juego alegre y coral de las jugadoras que habían logrado ser campeonas de Europa de la EHF, segunda competición continental. La renta se redujo a dos al descanso (11-9) con un parcial de vuelta de 5-1.

Pese a un nuevo exigente inicio en el segundo período, España fue entonándose gracias a los goles de su capitana Belén Rodríguez. La lateral fue todo un vendaval en la anotación que le llevó a ser designada como la mejor del torneo gracias a sus ocho tantos en el duelo decisivo. Elena Torres, flamante fichaje del BM Montequinto que se incorpará a las filas del cuadro nazareno en los próximos días, anotó el 15-14 para poner por delante tras muchos minutos a las jóvenes guerreras. Un marcador que se estiró hasta el 19-14, la mayor diferencia española.

Dinamarca apretó en los últimos minutos del mismo modo que lo hizo ante Francia en semifinales, cuando perdía por cinco goles en el minuto 34. Redujo la distancia a dos, pero dos nuevas incursiones de una excelsa Belén Rodríugez y de Estitxu Rodríguez, servían de nuevo la comodidad. En el último arreón danés y con el deseo de forzar la prórroga, Marta Regordán anotó un tanto desde los siete metros (sumó 5 goles en total). Restaba sufrir unos últimos segundos, pero una gran actuación defensiva de las españolas finiquitó la faena. El oro vuela a España, con una gran parte de culpa de las sevillanas.