Las puertas siguen abiertas
Castro reconoce que el club medita el traspaso de Iborra y deja caer que llegarán dos refuerzos, con Sirigu a punto y un medio centro. El delantero dependerá de Konoplyanka.
El Sevilla podría superar los diez refuerzos para el nuevo proyecto. Salvatore Sirigu será el décimo, una vez que pase el reconocimiento médico y firme por un año cedido sin opción de compra, trámites que realizará hoy tras aterrizar anoche en San Pablo. El propio Monchi reconoció desde el Forum Grimaldi de Montercarlo que podría haber más. "Estamos en la recta final y muy cercanos al míster, y a ver qué pasa", añadió el director deportivo sobre los varios movimientos que aún puede haber de aquí al miércoles 31. Y José Castro, tras la ofrenda de flores a la Patrona de la Archidiócesis, insistió en esa idea de que las puertas están abiertas tanto para fuera como para dentro. "Hasta el 31 puede haber cambios", reconoció el presidente sevillista, que habló de dos posibles refuerzos. "No creo que sean tres".
"La verdad es que tenemos una oferta importante por Iborra -reconoció el presidente sevillista en relación a los contactos con el Sunderland-. En estos momentos no tenemos claro si aceptarla. Estamos estudiándola y ya veremos la decisión". El dirigente no evitó hablar de todas las cuestiones relacionadas con la planificación. Por ejemplo, no descartó a Roque Mesa, aunque sea harto complicado retomar esa negociación. "No lo sé, en fútbol no se puede decir a nada que no. En estos momentos no es una opción", aseguró sobre el medio canario.
Castro abundó en la posible venta de Iborra, que abriría un hueco para el medio que ha solicitado Jorge Sampaoli, como consecuencia del modelo de gestión del Sevilla. "La política de este club es estudiar todas las ofertas que lleguen, unas se pueden aceptar y otras no. Van a depender de las ofertas. No nos va a temblar el pulso por vender a un jugador cuando entendamos que su precio está fuera de mercado. Hemos vendido a Krychowiak y a Gameiro por unas cantidades desproporcionadas".
En cuanto al entrenador, dio varios apuntes. El primero, referido a que el club está dispuesto a satisfacer sus peticiones. "Estamos trabajando para que tenga los jugadores que quiere e intentar hacer un equipo que valga para sus ideas. Nosotros queremos conseguir más, ganar todo, y para ganar todo hay que intentar todo, intentar cosas nuevas, que es lo que nos ha hecho grandes". Y el segundo, sobre la necesidad de ir con calma ante el nuevo proyecto. "Hay que tener paciencia para ese fútbol que genera el equipo con Sampaoli. Hacía casi 40 años que no marcábamos seis goles -en el Sánchez-Pizjuán-. Tenemos que mejorar mucho, pero hay que tener paciencia porque es un proyecto nuevo, un sistema y un equipo nuevo y hay que tener esa paciencia que sin duda el presidente le va a dar para que pueda trabajar con sus ideas", dijo, y añadió taxativo: "Tenemos que arroparlo y darle los jugadores que requiere. Vamos a morir con este proyecto".
Por último, Castro hizo un aparte. "Quiero hacer una reflexión que los sevillistas más jóvenes no lo pueden entender quizás. Pero los mayores sí entienden lo que significa ser en estos momentos el décimo club de Europa -por coeficiente-, algo que no tiene relación con los presupuestos".