24 en plantilla y 9 cedidos

El Sevilla no va a realizar ningún fichaje en enero, salvo sorpresa de última hora. Unai Emery está conforme con la amplia y versátil plantilla que tiene y, además, la dirección deportiva debe cuidarse muy mucho de recomendar ningún fichaje al comité ejecutivo porque en Nervión hay peligro de overbooking. Monchi ha logrado colocar en enero a tres de sus futbolistas excedentes, que aligeran algo la nómina. Los huecos dejados por los últimos cedidos han permitido al Sevilla hacer dos nuevas inscripciones en la Liga de Fútbol Profesional. Ya ha realizado la de Cicinho, que se encontraba sin ficha durante su larga recuperación y Alberto Moreno, que tenía ficha del filial (dorsal 32 en la Liga y 16 en la Liga Europa) y desde este miércoles cuenta con dorsal del primer equipo. El canterano, según prescribe su contrato, debía ocupar una plaza profesional en cuanto hubiera un hueco, y ya lo hay.

Después de los préstamos de Rusescu, Julián y Rabello, el técnico sevillista se encuentra cada mañana con 24 futbolistas sobre el césped y ni siquiera puede repartir los esfuerzos debido a la eliminación copera. Cicinho tendrá el dorsal 24 que perteneció a Rusescu y Alberto Moreno, el 14 o el 25 de Rabello o Julián. De esta forma, el Sevilla roza el tope de 25 que llegó a exceder antes de las salidas de enero. La idea inicial con el lateral brasileño, que se encuentra en su puesto con Coke y Figueiras, era buscarle un destino idóneo para que coja ritmo competitivo con minutos. No ha podido ser, de ahí que a partir de ahora tenga que batirse por un hueco en el equipo. Emery ya dio pistas de que quiere probar a Figueiras en la izquierda, donde ya jugó en el Paços de Ferreira a pie cambiado y está usando últimamente a Alberto Moreno más como extremo o carrilero que como lateral. Esto le abre un resquicio al brasileño en su vuelta al equipo después de una larga recuperación de medio año tras su grave lesión, con rotura del ligamento cruzado de la rodilla, en el tramo final del último partido de la pasada temporada, ante el Valencia.

Monchi, pese a no dar con una salida para Cicinho, sí ha encontrado acomodo a Rusescu (Sporting de Braga), Rabello (Deportivo de La Coruña) y Julián (Almería), que se unen a los seis cedidos en verano: Manu del Moral y Botía (Elche), Stevanovic (Elche hasta que el club lo descartó), Guarente (Catania), Babá (Levante) y Javi Hervás (Hércules). En total, el Sevilla tiene en nómina a 33 futbolistas, 24 en su primera plantilla y 9 cedidos en diferentes destinos.

La plantilla blanquirroja contaba al iniciar la presente temporada con 26 profesionales a todos los efectos competitivos, 28 si se sumaban Maduro, que no tenía ficha, y Cicinho, sin dorsal hasta ahora. Pero poco a poco, las arcas del club van soltando lastre. El holandés se desvinculó para firmar por el PAOK, con el que ya ha marcado un gol, y la nueva hornada de cesiones enjuga la partida para las nóminas del plantel.

Sin embargo, ese lastre se va soltando muy poco a poco, dado que muchas de las cesiones son con pagos compartidos de dichas nóminas. Y, además, únicamente en dos casos el Sevilla ha incluido en la operación una opción de compra: de 1,6 millones por Guarente, que cumple contrato en 2015, y de unos 3 millones de euros por Rusescu, que firmó en Nervión hasta 2018. Las actuaciones del rumano en el Sporting de Braga, donde ha encontrado la deseada regularidad, instan al optimismo.

Con Perotti buscando una salida con permiso del club, aún es posible que de aquí al viernes, cuando expira el plazo invernal en Europa, haya alguna novedad. De momento, la posibilidad más factible para el argentino es otra cesión, pero con opción de compra de 4 millones de euros, al Werder Bremen. Con él se llegaría a la decena de préstamos, aunque el Sevilla preferiría un buen traspaso en su caso.

Debido a este excedente, el Sevilla mantiene una elevada partida para pagar fichas, más que el curso pasado y pese a la salida de Negredo, Jesús Navas y Palop. Es lógico, por tanto, que ahora mire con lupa cada céntimo en el contrato de renovación que negocia con Rakitic, que, según Canal Sur Radio, pide más de 3 millones de euros limpios (7 brutos) por año.