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Esta película me suena...

El Bernabéu no perdona los errores y el Betis cometió dos en momentos clave, uno de Paulao y otro de Pabón

Chica, que percutió bastante por el flanco derecho, arranca para frenar a Cristiano Ronaldo.

21 de abril 2013 - 05:02

A los aficionados al cine no les importa revisionar películas de empaque, para disfrutar de nuevo, más que del conocido argumento, de los detalles formales: la puesta en escena, los planos olvidados, la banda sonora, la interpretación de los actores... A los aficionados al fútbol, en cambio, les molesta toparse de nuevo con algunos partidos que parecen responder a un guión base de la historia del balompié hispano: el Bernabéu no perdona los errores. En este caso, el argumento es archiconocido. El Betis cometió dos errores en momentos clave y el digno partido ante el Madrid no tuvo premio.

A sólo cinco segundos del minuto 45, Paulao se quedó atrás mientras el resto de la defensa salía para inhabilitar a Özil. Ese pase de Benzema a la espalda de la zaga lo había intentado una y otra vez el Real Madrid sin éxito por la valentía con que los hombres de Pepe Mel tiraban la línea lejos de la frontal del área. Pero en ese momento, Paulao se despistó y los blancos, sin haber hecho gran cosa, al margen de un latigazo increíble de Cristiano Ronaldo al palo, se fueron al descanso con 1-0.

En el 2-0 mediaron la habilidad de Özil, Cristiano Ronaldo y Benzema y el infortunio de que Álvarez Izquierdo no apreciara fuera de juego en una jugada algo dudosa. No hubo yerro bético. Éste llegaría, empero, cuando más duele, a dos minutos del final y después de que el penalti marcado por Jorge Molina abriera la espita de la esperanza. Pabón, con toda la portería para él, le entregó el balón a Albiol sobre la línea. Era el minuto 88 y ese gol habría sabido a gloria, no tanto como el empate de Igiebor en el 89 en el derbi, pero con un dulzor estimable. Habría premiado el desparpajo del Betis. Pero el colombiano erró y el tercer gol blanco fue el castigo.

El Bernabéu ha deparado últimamente algunas alegrías para el Betis. Aquel triunfo con goles de Aquino en la 94-95 ante miles de béticos; aquel otro en la 98-99, con solitario tanto de Finidi; o el empate en la Copa con gol de Dani que eliminó al Madrid (06-07). Pero ayer no se dio el que hubiera sido el octavo empate bético en Chamartín en la Liga. El final sonó a película ya vista... Ya recuerdo el título, Cometieron dos errores, un spaghetti-western de Clint Eastwood. La traducción en el fútbol es que el Bernabéu no perdona errores.

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