El mejor Sevilla tumba al Lyon (1-0)

El Sevilla jugó sus mejores minutos del presente curso para derrotar con justicia y solvencia a un buen Olympique de Lyon que aunque pudo marcar debió caer por mayor margen. El segundo tiempo sevillista, guiado por un sensacional Nasri y un menos estelar Vitolo, resultó imparable para el equipo francés. El estreno casero en la Liga de Campeones hizo extraordinario el empate de Turín y las enorme dudas ofrecidas en los últimos encuentros, aunque tuvieron continuidad en un primer acto grisáceo, quedaron temporalmente atrás con un estupendo equilibrio, un balance defensivo estupendo y una capacidad ofensiva inagotable.

Sampaoli salió con toda la artillería que tiene y situó a Vietto y al 'indultado' Ben Yedder prácticamente juntos arriba, con la izquierda para Vitolo y la derecha más Franco Vázquez que nadie, aunque el ex del Palermo evidencia un bajón físico y mental notable. Nasri sigue libre pero muy vigilado y N'Zonzi queda como pivote. Los cuatro de atrás se convierten en tres con el balón porque el Lyon ubica dos delanteros y obliga al Sevilla a guardarse bastante. Tres centrales sitúa Bruno Genesio y cinco centrocampistas liderados por Gonalons que dejan muy poco margen para un Sevilla demasiado dependiente de Nasri.

El plan del Sevilla parece razonable pero en la práctica hace poco daño, mientras el Lyon a la contra ofrece más sensación de peligro e incluso Fekir tira al larguero apenas pasado el 10 de partido tras una pérdida de N'Zonzi. Se ve a un Sevilla previsible pero que puede aprovechar la línea de 3 atrás del rival, y de hecho un saque largo de Pareja lo deja de cabeza Vitolo para la llegada de los puntas. Ben Yedder no llega pero sí Vietto, que tira al muñeco esfumándose la ocasión más clara del Sevilla en todo el primer tiempo. Van 16 minutos y hasta el descanso no hubo más tiros a puerta del Sevilla, que poco después ve anulado un gol a Ben Yedder por fuera de juego que no parece serlo de Escudero y luego apenas reclama una caída de Mercado.

Es el Lyon quien más peligro desliza y Cornet puede desnivelar después de llevarse un rechace con tres rivales cerca. Rico desvió y el Sevilla respiró , aunque sin poder tapar que el Lyon triplicó las llegadas locales hasta el descanso.

El descanso supone un punto de inflexión en este Sevilla de estreno casero en la Liga de Campeones y de, por qué no, de lo que llevamos de temporada. El segundo tiempo ofrece el ansiado equilibrio con un equipo mandón y de llegadas constantes sin descuidar la defensa. Cierto que el Lyon tuvo dos ocasiones fantásticas, un paradón de Rico a Tolisso y un tiro de éste a la madera, pero no lo es menos que el Sevilla dio lo que debe ser su nivel deseable, con una docena de llegadas a cual más peligrosa, penalti fallado incluido.

Es un Sevilla de un balance defensivo óptimo y un ataque fluido y abierto en el que Nasri hace definitivamente suyos todos los galones de la construcción de juego. Vitolo secunda al francés pero ver al jugador cedido por el Manchester City es una auténtica gozada. Por dentro, por fuera, entrando y saliendo, donde quiera. Corre sin parar, piensa sin parar y transmite a los demás que se debe jugar a un ritmo superior.

El tanto, cierto, no parte de Nasri, pero eso es un detalle menor. Es NˋZonzi quien saca un centro descomunal al segundo palo, donde Vietto supera al portero para que Ben Yedder la empuje adelantándose a la defensa. Es el minuto 53 y el monólogo sevillista es evidente, con hasta tres intentos consecutivos de un Nasri desatado. Ojo que Tolisso tuvo una gran ocasión al minuto del gol local, pero la impresión del Lyon cambió por completo, el control local fue adecuado y las ocasiones caían como aceitunas en el verdeo.

Vietto, que había propiciado el gol, falló una ocasión tras otra. Una recuperación de Ben Yedder lo dejó solo ante Lopes, pero tiró al muñeco. Un penalti a Nasri lo tiró arriba, muy arriba, en el 69, y una asistencia tremenda de Nasri la picó superando al meta para que Morel la sacara a tiempo. Total, delantero que está en todas pero no acaba ninguna. Y una asistencia suya la mandó fuera Iborra....

El carácter previsible del Sevilla del primer tiempo se quedó en el olvido y, sin llegar a pasar por encima del Lyon, se impone de manera nítida y con visos de que el 1-0 final es francamente corto. Cierto que el Lyon pudo, debió, marcar, pero no lo es menos que un único gol para los méritos locales es una falacia total. Además de justo, el triunfo fue corto. Mucho.

El punto de Turín puede ser ahora diferencial con este triunfo ante el verdadero rival del grupo, que además ahora tiene un doble enfrentamiento con la Juventus. El panorama para el Sevilla está donde mejor podía estar. El mejor Sevilla de lo que va de curso apareció en el momento justo, Nasri es el líder absoluto y un ´fantasista´ de postín y Sampaoli, esta vez, puede estar más que satisfecho con lo ofrecido por el Sevilla. La segunda parte, sin duda, es para ponerle adjetivos amorosos.