"Hay que levantarse ya"

Dolido, frustrado, pero con ánimos suficientes para animar a todo el sevillismo a sacar fuerzas en estos momentos duros para unirse en torno al equipo en pro de los dos objetivos pendientes. José María del Nido analizó el varapalo de la Champions e, inmediatamente, puso la vista en el futuro inmediato, con un mensaje claro: "Hay que levantarse ya". El mandatario intervino en la radio del club para instar a la afición a "aparcar el debate sobre Jimenez hasta el final del campeonato", porque lo contrario es muy dañino para el club, según explicó.

"En los momentos difíciles es cuando hay que dar la cara", exhortó el mandatario, quien comprende perfectamente el ánimo de su hinchada: "El sevillismo todavía no ha salido de esa grandísima desilusión y todavía estamos buscando las razones por las que nuestro equipo, pese a que creíamos que era superior, no pudo en ningún momento con su rival. Ayer estuvimos mal, tremendamente mal, salvo al inicio. En ningún caso fuimos superiores al CSKA, fueron superiores y hay que felicitarlos". "Pero tenemos que pensar que ese partido fue el ayer -añadió-, aquello pasó y hay que levantarse ya y pensar en los dos campeonatos en los que, afortunadamente, estamos vivos".

Evidentemente, la figura de Jiménez salió muy dañada tras su nueva frustración en una eliminatoria tan trascendente, como ocurrió hace dos años ante el Fenerbahçe o el curso pasado en San Mamés. Del Nido asumió la protesta del aficionado al final del partido, pero quiso calmar las aguas: "La afición, que es soberana, suele manifestarse con la acritud que cada momento requiere. Ayer fue un momento amargo y un amplio sector de la afición se manifestó como creyó oportuno. Los dirigentes tomamos nota de ello, porque tenemos la obligación. Pero debemos tener la sensatez de aparcar un debate que lleva abierto mucho tiempo por distintos motivos. Y no por no entrar en el debate, sino porque le interesa a la entidad".

¿Y por qué interesa al club aparcar el debate? Muy sencillo: "La entidad se lo está jugando todo todavía, lo de ayer era una ilusión, un querer ser más grande en Europa, pero donde de verdad nos jugamos los cuartos, el prestigio nacional y la posibilidad de seguir configurando un proyecto ilusionante es en la Liga, y en la final de Copa, que nos podría dar un título. Para nosotros es una obligación estar entre los cuatro primeros. Y estamos ahora en la mejor disposición para ello. El debate sí, pero como hizo la afición ante el CSKA, al final del encuentro, cuando ya no podía ayudar al equipo como hizo antes".

Del Nido dio sus argumentos para pedir el receso de ese debate hasta mayo o junio: "Quedan dos meses y tenemos que ser capaces, entre todos y yo el primero, de conducir a la plantilla a los dos éxitos que nos quedan por conseguir. Hay que transmitirle esa confianza al plantel, para la Liga y para la Copa. Lo de ayer fue un desastre, pero la temporada puede ser magnífica si conseguimos los dos objetivos que tenemos a mano".

En ese sentido, Del Nido se mostró firme en su idea de mantener en el cargo a Jiménez, aun sin decirlo así: "Tenemos que mantener el mismo criterio que hemos mantenido hasta ahora para terminar la temporada con una nota excelente; si quedamos entre los cuatro primeros, preferentemente el tercero, un objetivo alcanzable, y si somos capaces de dar nuestra talla en la Copa y traer otro título".

Eso sí, no dejó de apretarle las tuercas al técnico sevillista: "Ya no hay excusas, que incluso el presidente ha empleado, de las bajas de jugadores. El plantel está prácticamente al completo a disposición del cuerpo técnico, que tiene numerosísimas alternativas para configurar una convocatoria de 18 futbolistas de plenas garantías".

Por último, quiso animar al objetivo de la mayoría de las iras: Jiménez. "Como todos los sevillistas ayer, y por su responsabilidad, estaba hundido. Hasta que han pasado las horas no ha podido reaccionar, pero está tranquilo. Sabe que mañana tiene que empezar un nuevo camino. Todos tenemos que arroparlo y aparcar un debate que sólo puede hacer daño a la entidad hasta el final de la Liga", insistió.

Y también elogió a Palop: "Sería muy injusto que recaiga la culpa en el portero más importante de nuestra historia y el único que nos ha dado un título individualmente, en quien nos ha dado tantísima gloria. La culpa de ayer la tenemos todos, desde el presidente al utillero. Quiero romper una lanza a favor de nuestro capitán, uno de los más importantes de nuestra historia".