La ilusión de Muniain y Raíllo en la final de la Copa del Rey
Athletic - Mallorca
Los capitanes de Athletic y Mallorca muestran su deseo de conquistar el título copero
Aficionados del Athletic y del Mallorca toman Sevilla
Sevilla/Iker Muniain, capitán del Athletic Club, aseguró en la tarde de este viernes que "el favoritismo no gana partidos, y menos en una final", en alusión a la de la Copa del Rey que disputarán el sábado ante el Real Mallorca en el estadio de La Cartuja, en Sevilla.
El centrocampista navarro, de 31 años, atendió a la periodistas en el estadio sevillano momentos antes del entrenamiento del equipo bilbaíno y destacó que "la palabra favorito y la Copa del Rey no encajan en un mismo contexto". Muniain auguró un partido "igualado" y dijo que el equipo "está preparado y mentalizado" para medirse un rival "muy duro que ha eliminado equipo fuertes que apuntaban a esta final. Todo el respeto del mundo al Mallorca, pero el optimismo por las nubes".
El centrocampista recordó que jugará su quinta final de la Copa con el Athletic y que las cuatro anteriores las perdió, aunque también se refirió a que sí logró ganar una Superliga en este mismo escenario, ante el Barcelona. El veterano futbolista, que cumple su decimoquinta temporada en el equipo vizcaíno, recordó que ésta es la tercera final de Copa que disputa en La Cartuja, aunque las otras dos fueron sin público por las medidas sanitarias impuestas por la pandemia. Muniain dijo que "es una grandísima noticia que las cosas hayan cambiado para bien" después de que en aquellas citas "no se pudiera contar con el ambiente en a gradas y en las calles", por lo que se mostró contento por el hecho de que "la gente pueda disfrutar".
El medio pamplonés comentó que "las sensaciones son buenísimas. El equipo ha entrando muy bien esta semana y está preparado" después de que en esta temporada estén "en una buena dinámica" que esperan "llevar al terreno de juego mañana". También se refirió a que esta campaña tiene menos protagonismo en el equipo, con menos minutos de juego, pero que llega a esta final "con toda la ilusión, como si fuera la primera, con toda la ambición", aunque "es verdad" que tiene "otro roll". Munuian, quien se refirió a la actual plantilla del Athletic como "la más completa y equilibrada" de todas en las que ha estado, aseguró que intentarán en esta final "ser protagonistas" ante un Mallorca "ordenado, físicamente fuertes e intensos".
Mientras, el capitán del Mallorca, Antonio Raíllo, afirmó que están "muy tranquilos, preparados" y "sin presión" ante la final de la Copa del Rey frente al Athletic y, tras recordar que hace seis años estaban en Segunda B, consideró que se merecen el título porque "han salido del infierno para a día de hoy poder tocar el cielo". En la sala de prensa del estadio de La Cartuja de Sevilla, escenario de la final de este sábado, el defensa mallorquinista destacó este viernes que siente "emoción por todos los compañeros" que, en campañas anteriores, han estado "en este trayecto", pues "en todo camino hay baches o piedras que saltar para seguir hacia adelante", y dijo que lo siente "como aficionado del Real Mallorca" porque ya está "muy arraigado en la isla".
"Creo que nos lo merecemos (el título). Hemos vivido muchos momentos muy difíciles, hemos salido del infierno para a día de hoy poder tocar el cielo", indicó antes del entrenamiento Raíllo, quien manifestó que muchas veces han jugado para no descender y ahí "te juegas la vida", por lo que "es mucho más dificil de soportar que la presión por el éxito". Preguntado por su sentimiento después de que hace sólo seis años estuvieran luchando por subir de Segunda B a Segunda, señaló que, "como para cualquier aficionado", esta oportunidad "es una alegría, una ilusion".
El capitán bermellón declaró que, si el Mallorca gana, "claro" que firma llegar a los penaltis y resaltó que el partido de Segunda B en el que hace seis años tenían "la obligación de ganar" para "salir del pozo" y subir a Segunda, como hicieron, "tenía mucha más presión" que esta final, aunque en el de mañana "la repercusion es mucho más grande", "Hay que recordar los buenos momentos para disfrutar y los malos para aprender. Muchos de mis compañeros se han quedado por el camino, ahora los méritos o los halagos se los va a llevar la plantilla actual, pero los compañeros de Segunda B o de Segunda han conseguido el mérito de llevar al Mallorca hasta aquí, han formado parte de este camino, han ayudado a llegar a esta final y hay que agradecérselo", recalcó. Sobre su entrenador, el mexicano Javier Aguirre, el central cordobés lo calificó como "un técnico muy especial, un poco atípico, muy cercano", y añadió: "tiene mucha experiencia, te trata como un padre, un amigo, un familiar, tiene a todo el mundo enchufado, maneja muy bien el trato personal y eso es lo que hace que lleve a su equipo así de bien".
Raíllo, de 32 años y que lleva ocho en Mallorca, aseguró que van a ir en la final "con paso tranquilo" y que es "un partido primordial" y en el que "si no ganas, esa opción (conquistar la Copa) se borra", aunque intentarán "jugar lo mejor posible y que la gente esté orgullosa" de ellos, y si ganan la Copa, "mucho mejor". "Estoy muy tranquilo, pienso que es un partido más contra un rival al que ya nos hemos enfrentado y es importante qué es lo que hay fuera, pero tampoco darle un exceso de responsabilidad porque, al final, eso te puede mermar un poco. Este equipo es una familia y, más que compañeros, somos amigos. Si marco me alegraré, pero si es otro compañero, lo haré igual", comentó. Respecto al árbitro de la final, el andaluz José Luis Munuera Montero, quien lo expulsó en esta edición de la Copa ante el Girona, le deseó "lo mejor" y dijo que "se merece estar aquí", ya que "cada vez que ha pitado lo ha hecho excelente", además de que tiene "una buena relación con él, es paisano".
Consciente de que los seguidores mallorquinistas serán minoría en Sevilla ante el masivo desplazamiento de la afición del Athletic Club de Bilbao, Raíllo pidió a los hinchas bermellones que "no se sienta inferiores a nadie y se sientan orgullosos de sus jugadores", pues "ellos tienen muchos más socios, pero el sentimiento de las dos aficiones será el mismo".
También te puede interesar