No hundir al que se ahoga

REAL SOCIEDAD | SEVILLA

El cambio de Míchel, fatídico en un once sin fútbol en la columna vertebral

No hundir al que se ahoga
Jesús Alba

21 de diciembre 2012 - 05:02

Da igual los nombres, el problema del Sevilla es de concepto de fútbol: un don que no tiene ninguno de los jugadores que se alinean en la columna vertebral (si acaso ayer Kondogbia). Pero si, encima, el entrenador hunde la cabeza del que se está ahogando cuando éste logra sacarla del agua para respirar, poco hay que hacer. Míchel cercenó con un cambio que seguramente tenía pensado desde el descanso la mejoría de su equipo en el inicio del segundo periodo en un partido, en su globalidad, nefasto del Sevilla. Cuando Reyes -justo después del empate- estaba llevando peligro al área de Bravo, con un disparo incluso a la madera, fue sustituido por un Rabello que no está preparado para jugar en la Primera División española. El enfado del utrerano fue evidente, público y manifiesto.

DEFENSA

El cuarteto de atrás sufrió mucho en la primera parte por la falta de tensión de la pareja de medios centro y algunos despistes tácticos de Medel. A veces por no estar en su sitio y a veces por mera inferioridad numérica por la presión adelantada de la Real Sociedad. El equipo guipuzcoano tenía la lección bien aprendida, pues no hay que ser un lince para percatarse de que el Sevilla domingo a domingo muestra una incapacidad preocupante para sacar el balón desde atrás si se le aprieta un poquito arriba. El gol llegó en una presión mal hecha de Medel que originó el desequilibrio defensivo que la Real aprovechó para tocar y llegar hasta la cocina.

Luego, tras la breve fase en que mandó en el partido, el Sevilla tuvo el mismo problema en las transiciones ataque-defensa, ejecutadas todas de manera lamentable.

ATAQUE

El Sevilla no tiene ese futbolista que pida el balón entre los centrales con valentía y lo lleve arriba. Sin Rakitic, mucho menos, y Reyes, aunque más adelante, se veía obligado a hacer esa función para la que no está capacitado. El Sevilla, como siempre, ataca a impulsos, no tiene un plan previsto y buenos futbolistas que destacarían en un bloque, como Jesús Navas, como Negredo y como Reyes -y los tres lo intentaron- acaban cansados y aburridos.

VIRTUDES

Kondogbia y la reacción del inicio de la segunda mitad.

TALÓN DE AQUILES

Aparte de las carencias que siempre son las mismas, una decisión nefasta de Míchel.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último