La gran esperanza

Luis Fabiano volverá a la titularidad del equipo para acabar con la sequía de los delanteros del Sevilla y ayudar en su reto histórico de meterse en los cuartos de la Champions

Luis Fabiano juega con el balón oficial de la Champions League durante la sesión preparatoria de ayer.
Luis Fabiano juega con el balón oficial de la Champions League durante la sesión preparatoria de ayer.
Eduardo Florido / Sevilla

15 de marzo 2010 - 05:02

Jiménez tiene un antídoto contra la sequía que parecen sufrir sus goleadores en las últimas citas y que ha influido negativamente en el atasco liguero del Sevilla. Atiende por Luis Fabiano Clemente y es el máximo goleador del equipo en total, pues acumula 15 tantos entre las tres competiciones. Su vuelta es la gran esperanza de un equipo que necesita toda la ayuda posible para la clasificación a los cuartos de final de la Liga de Campeones, con la que igualaría el hito al que llegó en la campaña 57-58, cuando cayó de manos del intratable Madrid de Di Stéfano tras superar en los octavos de final de la Copa de Europa al Aarhus danés. 52 años después, el reto histórico está ahí.

El delantero centro de Brasil, el poseedor de la ansiada camiseta número 9 de la canarinha, será titular mañana, apenas una semana después de que llegara de Sao Paulo haciéndose algo el remolón. "Me gustaría jugar contra el CSKA, tengo muchas ganas de ayudar a mis compañeros, pero para jugar tengo que estar al 100%", dijo el paulista a los medios del club nada más aterrizar en San Pablo.

Bastaron los mimos de José María del Nido, quien después de hablar con el jugador lo concitó públicamente a meter el hombro, nunca mejor dicho, para que el futbolista se pusiera a las órdenes de Jiménez el lunes de la semana pasada, un día después de aterrizar.

Luis Fabiano permaneció en Brasil cerca de dos semanas después de que la lesión que tenía entre el pectoral y la clavícula, y que venía molestándole desde hacía tiempo, deviniera en rotura fibrilar en Mallorca. Se perdió los partidos con el Athletic y el Real Madrid y, después de las muchas dudas que despertó su lesión, reapareció con buen tono el sábado ante el Deportivo, mucho antes de lo que había previsto el médico de la selección de Brasil.

José Luis Runco, el galeno de la canarinha, dijo a través de las páginas de este periódico que Luis Fabiano estaría listo, como pronto, para abril. Evidentemente, la perspectiva en Brasil, en un año de Mundial, es muy distinta a la que hay en Sevilla. Jiménez ya dijo que él se fiaría de lo que dijeran los médicos del club y que contaría con él para el partido contra los rusos siempre que estuviera en condiciones óptimas. Y ante el Deportivo ya lo hizo jugar 40 minutos para que retomara el contacto con la alta competición.

Luis Fabiano dejó buenas sensaciones en el entrenamiento de ayer, después de que ante el Deportivo realizara un espectacular cabezazo al larguero tras sustituir a Negredo, que, pese a su voluntad, no logró conectar apenas ni un remate nítido en un partido en el que hubo muchos centros al área sin definición.

Para mañana el Sevilla espera al Luis Fabiano de las grandes noches, al mismo que encauzó la final de Eindhoven, las semifinales contra Osasuna o el triunfo sobre el Arsenal en la anterior edición de la Champions. De hecho, actualmente es el máximo goleador del equipo pese al lastre sufrido por sus dos inoportunas lesiones, un esguince de tobillo que lo tuvo de baja 45 días, entre diciembre y enero, y la susodicha rotura en el pectoral que le impidió jugar el último medio mes. Pese a estos dos meses de ausencia acumula hasta 15 goles en 26 partidos en las tres competiciones (1.706 minutos), con un balance superior a Negredo (10 goles en 36 partidos y 2.189 minutos) y Kanoute (8 goles en 26 partidos y 1.566 minutos). El dato es ilustrativo.

Todo indica que mañana será titular junto a Kanoute, que ante el Deportivo ya mostró una evidente mejoría de juego pese a no marcar. Porque el gol parece propiedad del paulista, la gran esperanza del Sevilla.

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