Del finísimo fondista que es Fabián al rol constructivo de Laporte

Memorable España por su juego, ante todo. Pero también por su profundo concepto del fútbol como un juego colectivo. Los primeros generosos con los compañeros han sido los extremos regateadores y que, por su juventud, podrían ser más propensos a las individualidades: Lamine Yamal y Nico Williams. El primero dio un destello para que el segundo marcara. Y los Fabián Ruiz, Laporte o Zubimendi volvieron a dar una lección de manejo con el balón en los pies y de darle al momento del partido lo que pedía. Equipazo el que ha ahormado Luis de la Fuente.

Laporte | Con Foden encima de Rodri, dio el paso adelante 

Otro partidazo el que se marcó el central de origen francés. No sólo sujetó a un delantero centro del nivel de Harry Kane, sino que dio un giro de tuerca más en labores de creación dadas las incomodidades de Rodri con el marcaje pegajoso de Foden. Cuando en la segunda parte, tras el gol de Nico, Inglaterra acumuló atacantes y colgó balones, emergió con su poderío aéreo. Su torneo, impecable. 

Fabián | Es un zurdo finísimo y también un gran fondista

Fabián Ruiz ha sido junto con Rodri el mejor centrocampista de esta Eurocopa. Por manejo de las situaciones, por su capacidad asociativa, por su calidad en el pase en corto y en largo y por su proyección ofensiva. Y a su enorme aportación técnica y táctica le ha añadido también un fondo físico impropio de estas alturas de temporada. La exhibición del palaciego criado en la cantera del Betis a lo largo de todo el torneo distingue a un portentoso fondista.

Zubimendi | Como si hubiera jugado desde el primer día

Impresionante la naturalidad con la que Zubimendi entró en la rueda de la selección española al tener que entrar por el lesionado Rodri en la segunda parte. No se dejó impresionar por la magnitud de la empresa (una final de la Eurocopa, Inglaterra enfrente y encima cubrir el enorme vacíod e Rodri) e interpretó su papel de mediocentro con un gran despliegue de atrás hacia delante.

Lamine Yamal | Su luz es cegadora aunque sólo sea una vez

El lateral Luke Shaw supo usar su físico para desplazar a Lamine Yamal y sacarlo de la jugada en sus primeras acometidas. No estaba suelto el genio de 17 años y tampoco estaba encontrando la asociación con Carvajal de otras veces. Pero a la primera ocasión que cortó, arrancó hacia dentro y dejó atrás al lateral inglés, encendió su luz única y cegadora y todos los de enfrente quedaron inermes. De nuevo su visión del pase y generosidad afloró para que marcara Nico.