Un duro palo, pero queda curso
Los jugadores destacan la tristeza del plantel y se centran en la Liga y la final de Copa
Con caras de tristeza, incrédulos aún por lo que había pasado en el césped, pero con la cabeza alta, los jugadores del Sevilla que pasaron por la zona mixta (pocos) no pusieron ningún pero a la derrota ante el CSKA, al que todos felicitaron, y pusieron hincapié en pasar pronto esta triste página para centrarse en todo lo que queda aún de temporada, "que es mucho e importante", decía Negredo
Precisamente el madrileño fue el primero que dio la cara ante los medios. No habló de fracaso y sí de "decepción". "Se pusieron por delante, nos repusimos, pero no pudimos superar su orden. Ellos estaban muy cómodos y hay que felicitarles. Jugaron sus cartas y aprovecharon la calidad que tienen arriba, donde nosotros nos atascamos. Ganas teníamos muchas, pero espacios, pocos", explicó el delantero, que prefiere desde ya mirar hacia delante: "El vestuario está triste, pero tenemos otra final ante el Espanyol y ya sólo nos vale ganar a partir de ahora para buscar esa tercera plaza".
Uno que no se esconde en ningún momento, bueno o malo, es el capitán, Palop, que habló del gol de Honda asumiendo su parte de culpa. "Igual que otras veces destaqué por ser el salvador, esta vez no tuve una noche afortunada y me encuentro muy apesadumbrado. Lo lamento mucho. El disparo venía muy duro, hizo un extraño antes de llegar a mí y me sorprendió", explicó el guardameta, que agregó: "Es un gran varapalo porque en el descanso estábamos convencidos de sacar la eliminatoria. Ha sido una pena porque lo intentamos, pero no pudimos de ninguna manera". Sobre las críticas de un sector de la afición al banquillo, el valenciano cerró filos entorno a Jiménez. "Pese a las críticas, el vestuario no va a abandonar al entrenador".
También hablaron Perotti y Capel. El argentino aseguró que "la diferencia estuvo en que el CSKA aprovechó sus oportunidades". "El vestuario está triste, pero tenemos una final y tenemos que cumplir en la Liga". Mientras, el almeriense afirmó que "el objetivo era pasar y es un duro palo del que hay que levantarse el sábado". Sobre el choque, apuntó: "Teníamos mucha ilusión en esta competición y nos vamos con la sensación de que no aprovechamos nuestras ocasiones".
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