La cesión de Rusescu, a falta de la firma
El presidente del Braga ya habla del rumano como un futbolista deseado desde tiempo atrás.
La cesión de Rusescu al Sporting de Braga, aquel equipo que eliminó al Sevilla de la Champions en el verano de 2010 y con el que mantiene muy buenas relaciones desde el fichaje de Beto, se puede dar por hecha. Sólo falta que sea firmado el acuerdo de cesión, después de las conversaciones mantenidas los últimos días, según se desprende de las palabras de su agente y del presidente del club del norte de Portugal.
Antonio Salvador, máximo dirigente del Braga, ha dedicado elogiosas palabras hacia el delantero rumano, uno de los primeros fichajes de la revolución que ha llevado a cabo el Sevilla este verano. "Es un jugador excelente, de gran calidad, el Braga lo sigue desde hace mucho tiempo y se ajusta a lo que es la ambición y el espíritu del Braga", ha llegado a decir el presidente de este club.
Asimismo, su representante, Victor Becali, se ha referido a lo bien que están encaminadas las negociaciones: "Está todo cerrado a falta de oficialidad. Es un buen paso para él. En el Sevilla jugaba poco. El Braga es un equipo que se adapta a sus características y tengo la certeza de que será titular en Portugal".
No le falta razón a Becali en cuanto a la escasa participación de su representado en el Sevilla, que llegó procedente del Steaua de Bucarest por 2,5 millones de euros como máximo realizador de la liga de su país. En la Liga, en cambio, apenas ha jugado un ratito, en el partido entre el Sevilla y Osasuna en el Sánchez-Pizjuán, cuando salió en el minuto 82 por Bacca, que aquel día formó en el ataque junto a Gameiro. Si el francés ya tiene dificultades para hacerse un hueco en el equipo, mucho más el rumano, quien al margen de aquel rato sólo fue convocado por Emery para un partido de Liga para otro partido casero, el del Celta, aunque permaneció en el banquillo y no jugó ni un minuto.
Rusescu ha marcado tres goles en siete partidos, que reparte entre la Liga Europa, con cinco citas y tres goles, el último de ellos en Friburgo, y la frustrada Copa del Rey, en la que fue titular ante el Racing tanto en la ida como en la vuelta sin destacar, siendo sustituido antes de la hora de juego en ambas citas. El rumano dejará una ficha libre, que podría ocupar Cicinho, quien está en la fase final de su recuperación.
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