El BM Proin Sevilla cae con un lanzamiento con el reloj ya parado (20-19)

Durísima derrota del BM Proin Sevilla en su visita a un Trops Málaga que prácticamente afrontaba el encuentro de vacaciones y con muchas ausencias en sus filas. Con el reloj ya a cero un golpe franco muy lejano fue transformado por Ignacio Moya con un lanzamiento que entró por la escuadra de la portería de Kirian, aunque para ello fue fundamental las facilidades dadas por los visitantes en la colocación de la doble barrera que habían dispuesto para que el empate a 19 fuera ya definitivo.

Fue de esas circunstancias que rara vez se dan en el balonmano, porque normalmente los lanzamientos con el reloj a cero con barrera acaban sin ningún éxito para el que ataca. Pero esta vez el golpe franco había sido tan lejos que los sevillanos colocaron una doble barrera, la primera con dos hombres y la segunda con el resto del equipo. En la primera de ellas el primer error fue que estuviera Deco, que no es uno de los jugadores más altos de la plantilla y por ahí pasó el lanzamiento de Moya para que después la pelota se dirigiera directamente a la escuadra ante un sorprendido Kirian, que tampoco fue capaz de repeler un tiro desde tan lejos.

La euforía, lógicamente, se desató en un equipo malagueño que incluso se ha desprendido de algunos de sus jugadores en calidad de cedido a la Liga Asobal a la vista de que prácticamente se ha quedado sin objetivos en la presente temporada. Los locales casi estaban de vacaciones y no ganaban un partido desde mitad de febrero. Pero el nivel del BM Proin Sevilla estuvo muy lejos del deseado en esta ocasión y el objetivo de evitar el descenso se puede complicar en las últimas jornadas.

Los sevillanos estuvieron particularmente desacertados en la faceta ofensiva, con numerosos lanzamientos por arriba de la portería, sobre todo a través de Llull y Montoro, los dos jugadores con altura de la plantilla de Víctor Montesinos, y también con algunos penaltis malogrados a cargo de Alberto Ruiz, David Martínez y el propio Ángel Montoro. Ninguno de los tres fue capaz de anotar desde los siete metros.

A eso también hay que sumar algunos errores arbitrales bastante groseros, sobre todo en la tarjeta roja directa a Julián López Mon en una jugada en la que difícilmente se podían aceptar dos minutos de penalización.

Pero fue el propio nivel del BM Proin Sevilla en ataque el que condujo a una derrota frente al Trops Málaga en un partido que parecía decantarse hacia el lado visitante antes de entrar en los cinco minutos finales. Ese lanzamiento final de Moya fue el castigo más cruel ante tanto desacierto.