Hola, hola..., a la ACB
Ascenso del Betis Energía Plus | Liga LEB Oro
El Betis saca su rodillo en el Pez Volador ante un peleón Real Canoe para sellar el ascenso
La defensa en el segundo cuarto abrió el camino de la victoria
Deseado, justo, ansiado, ambicionado… Pónganle la expresión que deseen, porque para un logro deportivo como un ascenso todo vale. Pero ese premio gordo a la extraordinaria temporada del Betis Energía Plus, que puso una guinda anticipada ganando al Real Canoe (66-86) para aporrear la puerta de la ACB, es, sobre todo, merecido. Porque el conjunto sevillano ha dominado la liga con puño de hierro y no se ha bajado de lo más alto de la clasificación desde que agarrase el liderato allá por la jornada 10ª. Desde entonces el paso por la LEB Oro, con título de por medio, no ha sido un camino de rosas aunque lo pareciera, porque los triunfos caían como rosquillas, con los avisos de Palma y Miribilla para que alguno no se relajara. Pero el objetivo, regresar a la Liga Endesa tras un año en este dulce infierno de la LEB, ya es real y está en la historia.
Como los nombres de sus artífices. Desde Curro Segura, que ha manejado a la perfección un grupo que lejos de celos por los roles de unos y otros ha sido un equipo en mayúsculas y sin fisuras, al último trabajador del club, que tras años de penurias por fin tienen algo por lo que sonreír. Subir con cuatro jornadas de antelación es un récord en la categoría propio de un conjunto grande, un plantel que tras firmar también la mejor racha ganadora de la liga, con esas 18 victorias consecutivas, quiere más y buscará, en lo que queda, demostrar esa ambición que lo ha caracterizado esta campaña manteniendo su imbatibilidad en San Pablo y acabar con ese mínimo de cuatro derrotas que refleja la clasificación.
Si hace 30 años la fiesta fue en Palma, esta vez el ascenso a la Liga Endesa llegó en la capital española. Habrá quien diga que hace tres décadas subió el eterno Caja San Fernando, cierto. Tanto como que ahora lo hace un Betis heredero del mítico club sevillano, que cuando languidecía y tenía la liquidación sobre la mesa vio la salvación coloreada de verdiblanca. De verdiblanco descendió tras 29 ejercicios en la élite y de verdiblanco volverá a ella tras imponerse en el Pez Volador en un partido que rompió en el segundo cuarto.
Ya fuese por los nervios iniciales de ver tan cerca la meta o por lo que fuera, sorprendió de inicio el Real Canoe, que reservó para las finales que le que quedan por la permanencia ante rivales directos a Tyson Pérez, MVP de la liga. Arrancó el choque con un triple de Borg, que dio paso a una sucesión de fallos de los visitantes (1/5 en triples) que aprovechó el conjunto madrileño con un gran acierto para mandar de inicio (9-5).
Tardó el Betis en entender que por dentro Stainbrook tenía superioridad sobre Chema Gil, que en la otra canasta, sin embargo, explotaba su velocidad.
Poco a poco se serenaron los verdiblancos, que empezaron a atacar con cabeza, aunque atrás las ayudas llegaban tarde y los de Miguel Ángel Aranzábal aprovechaban los despistes béticos para, con un gran acierto, mantenerse en el partido. La entrada de Pablo Almazán y Tunde afianzó la defensa del Betis y un triple de Dee ceró el primer cuarto con las espadas en todo lo alto (20-22).
Pero el conjunto menos anotador de la liga no podía proponerle al líder un intercambio de golpes. Era una osadía. Y en cuanto los verdiblancos se ajustaron atrás, el partido se rompió y el Betis sacó el rodillo. Un triple de Jugovic (25-28) dio paso a más de cinco minutos de sequía local y los de Curro Segura, que antes del descanso ya había sacado a todas sus piezas a la cancha, fueron paso a paso agrandando su ventaja. Para cuando Ander Martínez volvió a anotar, el 28-42 empezaba a dejar claro que el Betis no iba a dejar escapar el ascenso. La presión al rival desde que el base subía la pelota dejó sin ideas al Canoe.
Nada cambió tras el paso por los vestuarios y la producción hispalense asentó su ventaja en torno a los 20 puntos, disfrutando en la cancha como demostraba la conexión de Dani Rodríguez y Obi con dos alley oops consecutivos. Incluso con el choque resuelto la exigencia bética en defensa era máxima mientras Dee se gustaba desde el triple al son del "¡somos ACB!" que rugía la grada.
También te puede interesar
Lo último