Un ataque enchufadísimo

Si no hace mucho, coincidiendo con el momento más bajo de un proyecto que parecía no arrancar en el año de la mayor inversión económica, la afición empezaba a echar de menos los goles de Bacca, el ataque parece haberse puesto definitivamente las pilas.

Con dos goles ante el Real Madrid con la firma de Immobile y Fernando Llorente, poco ha tardado Gameiro en acelerar en su recuperación e incluso Juan Muñoz, el cuarto en discordia, a ver puerta. La competencia está a un nivel alto, una buena noticia para Unai Emery, que ve cómo todos sus delanteros aprietan para ponérselo difícil cuando daba la sensación de que su apuesta, por su desigual reparto de minutos, iba mayoritariamente dirigida hacia el francés. Éste, que tuvo que retirarse lesionado en Villarreal cuando Emery ya había hecho los tres cambios con una pequeña rotura de fibras, está avanzando a pasos agigantados para volver cuanto antes. De hecho, los médicos dan por seguro que el goleador de Lorient y PSG, máximo anotador del equipo junto a Konoplyanka con cuatro dianas, estará en "perfectas condiciones" para el partido en el que el Sevilla debe visitar a la Real Sociedad en Anoeta.

Gameiro trabajó este jueves en solitario en una sesión matinal en la que se pudo ver al francés tocando balón e incluso disparando a puerta. Teniendo en cuenta que a su favor corre el parón que sufre la Liga esta semana a causa de los partidos de las selecciones, el punta galo estará disponible para el entrenador a principios de la semana que viene después de haberse perdido por esta lesión los encuentros ante el Manchester City y el Real Madrid, ambos en el Sánchez-Pizjuán.

Tampoco ha desaprovechado su oportunidad el joven Juan Muñoz. A sabiendas de que parte en desventaja con respecto a Gameiro, Llorente e Immobile y que su negativa a aceptar la oferta de renovación que le ha presentado el club no juega precisamente a su favor, el utrerano aprovechó los 45 minutos que Emery le concedió el miércoles en el amistoso en Lugo para demostrar que sus maneras ante el gol siguen siendo las mismas. Juan Muñoz adelantó al Sevilla tras un buen servicio de Curro a diez minutos del descanso y manda de esta manera un mensaje a su entrenador pese a que tener por delante a Gameiro, Llorente e Immobile le deja pocas opciones.

Estos dos últimos, sobre los que había no pocas dudas en el seno del sevillismo, se terminaron de enchufar el pasado domingo en la victoria nervionense sobre el Real Madrid, un triunfo de sonora repercusión por la entidad y la literatura que siempre acompaña al rival. Immobile parecía poco menos que defenestrado por el entrenador y se especuló con mil historias desde su llegada, incluso extradeportivas. Sin embargo, fue el elegido por el técnico para salir de inicio frente el equipo de Rafa Benítez ante la baja de Gameiro y resultó una apuesta ganadora. El italiano, aparte de contagiar fe y aportar trabajo, marcó en difícil posición el gol del empate, señalando así el camino de la remontada, una reacción en la que tuvo un papel fundamental Llorente, quien marcó su tercer tanto esta Liga, aunque el primero que le sirvió al equipo para lograr una victoria. El riojano, sobre el que había muchas expectativas, aún no ha logrado una regularidad en su juego, algo reconocido por él mismo.

Cuatro arietes enchufadísimos elevando la competitividad del equipo, una noticia inmejorable para Emery, sin olvidar el buen momento que también mantiene Carlos Fernández en el filial.