El año en que todo se convirtió en oro

Si hace justo un año el sevillismo se preparaba para vivir un verano marcado por dos sonados traspasos, los de Jesús Navas y Negredo al fútbol inglés, a los que se sucederían las ventas no menos importantes a nivel económico como las de Luis Alberto, Medel o Kondogbia, el brillante final de temporada protagonizado por el equipo de Unai Emery ha disparado la cotización de otros futbolistas que prometen volver a convertir al club nervionense en el foco de atención del mercado.

El título europeo alcanzado en Turín y un final de campaña en la Liga en el que el Sevilla aceleró hasta llegar a soñar con llegar a arrebatar la cuarta plaza al Athletic ha elevado el valor de varios de sus futbolistas, algunos de los cuales está cantado que van a salir en las próximas fechas por cantidades impensables cuando el balón comenzó a rodar allá por los primeros días del mes de agosto.

Rakitic aparte, un jugador que ya se esperaba que fuera el líder del equipo y que su nombre está sonando junto a cifras atronómicas, la temporada 13-14 ha disparado el valor en el mercado de otros futbolistas. Suele pasar casi con el once titular entero cuando hay un título por medio y ni el entrenador -lógicamente- escapa a este fenómeno. Emery tuvo ofertas de clubes con pedigrí en Europa y aunque sólo trascendió la del Milan, el propio protagonista confirmó que hubo más interesados.

El caso más significativo ha sido el de Alberto Moreno. El del Cerro entró en el equipo la pasada campaña cuando el club vendió a Spahic y Emery facilitó las cosas reconvirtiendo en muchos partidos a Fernando Navarro en central. Alberto se disparó en verano al ser elegido mejor lateral izquierdo del Europeo sub 21, entró en los rumores de futurible para el Real Madrid y el Sevilla, que ya le había firmado un contrato en noviembre, tuvo que revisárselo. Llegó la internacionalidad absoluta y en el extranjero cada vez tuvo más predicamento pese a que ha completado un año irregular a fin de cuentas. No obstante, si en un año malo el Sevilla lo vende por las cantidades que se están diciendo (de 20 a 24 millones con variables), el negocio no puede ser más brillante. Su destino va a ser el Liverpool y las condiciones finales van a quedar fijadas en los próximos días, siendo de una manera o de otra un jugoso negocio para el Sevilla.

No fue el único, claro. Lo que parecía imposible, lo que el sevillismo más crítico ni podía imaginar... también se dio. Federico Fazio se convirtió en el líder de una defensa que se movió a su son en una temporada genial del argentino, la mejor sin discusión desde que llegara para reforzar el filial. Confiado, sereno, seguro de sí mismo... Fazio fue agrandando más y más su figura hasta convertirse en un central impresionante. Su calidad, su llamativa presencia física, sus goles en las jugadas a balón parado... disiparon esas dudas que siempre acompañaron al rendimiento del argentino. Los clubes que lo seguían saben ya que su crecimiento es un hecho. El Barcelona ya entró en las quinielas y es otro futbolista con bastantes posibilidades de salir este verano. El problema para el Sevilla es parecido al de Rakitic, y es que el club no tiene la sartén por el mango pese a que lo renovó por cinco años el pasado verano. Su cláusula de rescisión es baja y la negociación para renovar se prevé dura por el nivel de los clubes que lo quieren.

Pero son muchos más los futbolistas que han subido de valor al paso de esta campaña. ¿Qué decir de Carlos Bacca? El colombiano, que llegó por algo más de 8 millones, ha duplicado, cuando menos, su valor y está además a las puertas de un Mundial en el que su selección, en un grupo asequible, puede dar la sorpresa. Su compañero Gameiro, aunque no estará en Brasil, ha recuperado el prestigio que se ganó en el Lorient y que perdió en el PSG. Pero hay más: M'Bia, sobre todo con el gol en Mestalla, ha hecho que su nombre también suene en Europa; Pareja acabó imperial; Carriço se ha erigido en un jugador con un potencial táctico muy apreciado por los técnicos por su capacidad de mejorar a sus compañeros, y hasta el mismo Coke (quien tiene pendiente una negociación para renovar) es ya un lateral vistoso en el mercado. Sin olvidar a Vitolo, un futbolista que llegó sin experiencia en Primera y que se ha destapado como un titular fijo en un campeón europeo. Todo ello gracias a la magia de un año de ensueño, una campaña en la que prácticamente todo se convirtió en oro.