Vuelta a lo ya andado

El Betis es consciente de que ha perdido el estilo. Pepe Mel y sus futbolistas se han dado cuenta de que el equipo tiene muy bien aprendido cómo jugar y de que, al menos a la fecha, no sabe hacerlo de otra manera. Es la principal consecuencia obtenida de la derrota en Cornellà ante el Espanyol, toda vez que el Betis quiso jugar a otra cosa y le salió mal.

Mel, desde que aterrizó en Sevilla, concibió una idea de juego que, enseguida, supo impregnar en el equipo y, excepto en el presente, siempre le fue bien. Las derrotas, lógicamente, lo hicieron dudar y el jueves se vio a un Betis menos ambicioso, con menos posesión del balón y que, encima, acabó el partido sin dar señales de vida en ataque.

Evidentemente, al técnico madrileño no le ha convencido el experimento y el Betis que asome por los Campos de Sport de El Sardinero se parecerá más, con sus virtudes y con sus defectos, al de los ocho primeros partidos de Liga que a este último. Se observarán, como es habitual, pinceladas, retoques en determinados aspectos que, más allá del sistema de juego y del dibujo elegido, sí deben conferirle identidad al equipo.

Además, hay que contar con algo que ya se presumía cuando los mandamases del fútbol patrio decidieron que el Betis tuviese dos días de descanso menos que el Racing para preparar el partido de mañana. Por poner un ejemplo: Diop, el mejor futbolista de los santanderinos en este inicio de Liga, sufrió un esguince cervical frente al Sevilla que no le permitió entrenarse hasta ayer. Es duda, pero seguramente jugará, algo que no hubiese ocurrido con sólo dos días de recuperación.

Por esta causa, hasta cuatro futbolistas del Betis se perderán con seguridad el partido. Santa Cruz y Mario acabaron con sus respectivas musculaturas muy cargadas (el canario hubo incluso de ser sustituido en eldescanso) y no jugarán frente al Racing. Chica sufre una elongación en el bíceps femoral de su pierna derecha y, ante el peligro de una rotura fibrilar, tampoco lo hará. Y Amaya, que ayer trató de hacer fútbol en el entrenamiento vespertino de la ciudad deportiva del Racing, volvió a notar dolor en la tibia que tiene castigada a la hora de golpear el balón. Los cuatro jugadores que causan baja regresan a Sevilla.

Aunque los titulares apenas hicieron ayer ejercicios de recuperación, Ustaritz tuvo que retirarse a la media hora al notarse un poco cargado uno de sus aductores.

Sea como fuere, con uno o con otros, al Betis le urge volver a ser el Betis. Y así lo indicaba ayer el guardameta Casto. Siempre se ha comentado que desde la portería se ve muy bien el fútbol y el pacense, a juzgar por sus palabras, da fe de ello. "Tendremos que analizar el partido de ayer más profundamente, no lo sé, pero lo que está claro es que en otros partidos hemos tenido más ocasiones, hemos presionado más arriba... Hemos podido perder, ganar y empatar, pero sobre todo ganar, y en éste, la verdad, hemos tenido pocas ocasiones de ganar", argumenta.

El cancerbero verdiblanco coincide en la opinión de que el Betis perdió un tanto su estilo de juego frente al once de Pochettino. "Es cierto. Ha sido nuestro peor partido, porque incluso en los cuatro partidos que perdimos anteriormente tuvimos opciones de haberlos ganados o conseguir cosas importantes. Y ante el Espanyol fue el día que menos ocasiones hicimos y, sobre todo, menos claras. Pero de todo hay que aprender y ya sabemos que así no vamos bien y hay que hacer otra cosa para ganar", apostilla.

Casto está de acuerdo en que la senda verdiblanca la marcó el partido de San Mamés y que el equipo, ya mañana, debe parecerse al menos a aquél. "Creo que sí, a nosotros no nos vale con especular. Queríamos cambiar la dinámica y conseguir algo positivo para empezar a crecer, pero no pudo ser y lo que está claro es que hay que ir a por el partido desde el minuto cero. No nos queda otra", sentencia el guardameta.