A Valencia a por Maciá

El consejo de administración del Betis quiere cerrar ya el asunto de la estructura técnica de la próxima temporada, de ahí que el presidente, Juan Carlos Ollero, acompañado del administrador judicial, Francisco Estepa, prevean reunirse en Valencia con Eduardo Maciá, actual secretario técnico de la Fiorentina y el candidato preferido para ocupar la dirección deportiva bética.

Desde la llegada de Ollero al cargo, el club se marcó varios objetivos. A corto plazo se produjo el regreso de Pepe Mel para el banquillo, tras la transición realizada por Juan Merino, mientras que a medio, el consejo fijó el cambio de la estructura deportiva para la próxima temporada como una de las prioridades. "Sobre su reorganización trabajamos desde el primer día. Creemos que para planificar ya la campaña que viene debería estar reestructurada, a más tardar, en abril", declaró Ollero en una entrevista reciente, exponiendo esa necesidad inmediata de la entidad verdiblanca.

Ahí es donde surgió el nombre de Eduardo Maciá como principal candidato dentro de una amplia lista que manejó la cúpula deportiva del club -compuesta por Ollero, Estepa y el consejero José Miguel López Catalán-. La predisposición de Maciá ha sido absoluta desde el inicio, al entender que su etapa en la Fiorentina estaba agotada, al tiempo que desea encabezar un proyecto tras una carrera a la sombra tanto en el Valencia, donde se inició, como en el Liverpool o en el Olympiacos, los clubes en los que trabajó antes de recalar en el conjunto italiano.

El Betis le propone un contrato de tres temporadas, pero también le obliga a ofrecer una respuesta inmediata, ante la pretensión de iniciar ya la planificación del próximo año. Desde el entorno de Maciá, por su parte, se ha deslizado que éste entraría en los planes de un candidato a la presidencia del Barcelona, cuyas elecciones se celebran al final de temporada, por lo que aguarda antes de tomar una decisión definitiva sobre su futuro. Esta situación es la que provocará que tanto Ollero como Estepa traten de convencer a Maciá para dejar finiquitada su contratación sin condiciones, al entender que se trata del candidato ideal para iniciar un nuevo proyecto.

Ahora bien, los dirigentes béticos también manejan otras alternativas, por si finalmente no se pudiera concretar la deseada incorporación. Ahí es donde entran los nombres de Ramón Planes, como en su día informó este periódico, Felipe Miñambres o Manolo Salvador. La más factible sería la de Planes quien, pese a que colabora con el entrenador del Tottenham, Mauricio Pochettino, se encuentra sin equipo, por lo que su incorporación al Betis sería inmediata.

Pese a estas opciones en la mesa, Ollero confía en regresar a Sevilla con el sí de Maciá, con quien comenzaría esa anunciada reestructuración del área deportiva del club. El futuro de Alexis Trujillo, con dos años más de contrato, y José Luis Molina, que finaliza su vinculación en junio, quedaría, ahora, en el aire.

Una carrera en la sombra desde Valencia hasta la Fiorentina

Eduardo Maciá (Valencia, 1974) comenzó su carrera como ojeador del Valencia, donde fue asumiendo más responsabilidad y donde trabó amistad con Rafa Benítez, que se lo llevó a Liverpool cuando firmó por el conjunto inglés. En el equipo de Merseyside, Maciá fue jefe de los ojeadores como adjunto de Frank McParland, el director deportivo. Meses después de la salida de Benítez, Maciá también finiquitó su contrato en Inglaterra para poco después fichar por el Olympiacos, donde sólo permaneció unos meses, ya que su influencia en los fichajes no fue la deseada. En noviembre de 2011 se produciría su incorporación como ojeador de la Fiorentina, donde ahora ejercía de ayudante del director deportivo, Daniele Prade.