Con Urtasun, el cupo ya está cubierto

El primer movimiento oficial del Cajasol no coge a nadie por sorpresa. Lo de Txemi Urtasun estaba firmado desde hacía tiempo, pero el club tenía que esperar a que el Meridiano Alicante no lo incluyese en el derecho de tanteo y que el jugador resolviera los últimos flecos con su club.

"Tiene carácter y es un gran tirador. Esperemos que se pueda adaptar bien a la nueva distancia (6,75 metros) para que continúe siendo una amenaza importante desde el perímetro. Ha crecido mucho en los últimos años y creemos que llegan en un momento de gran madurez en su progresión", señaló Juan Llaneza, director deportivo del Cajasol, quien destacó "su compromiso con el grupo, ambición y magnífica ética de trabajo". "Posee unos excelentes valores deportivos y humanos, y eso es precisamente lo que estamos buscando", añadió.

El navarro ya es cajista por las dos próximas temporadas, y con su incorporación el conjunto sevillano ya cierra una cuestión que para algunos equipos supone un problema: los cupos. El Cajasol ya contaba en sus filas con Triguero, Sastre y el renovado Cabanas, de manera que con el escolta ya tiene a los cuatro nacionales que exige la ACB para una plantilla de 11 jugadores. Incluso si la dirección deportiva apostase por un plantel de 12, no habría demasiados problemas, ya que la normativa demanda para esta circunstancia contar con cinco españoles, uno de ellos sub 23. Sastre no cumple 19 años hasta diciembre, de manera que la entidad hispalense sólo tendría que fichar un jugador más para cumplir con la norma.

Con Txemi Urtasun, ya son cinco los hombres con los que Joan plaza cuenta ya seguro para la próxima temporada, pues a los cuatro mencionados anteriormente habría que sumar al checo Satoransky, también con contrato en vigor. Al tanteo hay sujetos tres más, Kirksay, Calloway y Ellis, de manera que, como poco, tendrán que llegar cuatro fichajes más, entre ellos un pívot americano y un ala-pívot titular, nacional o comunitario.

Ahora, el Cajasol anda tras Kaloyan Ivanov, con quien ya se han establecido los primeros contactos a través de su representante. Éste juega de momento al despiste, y señala que el de los sevillanos es un interés que se suma al de otros equipos tras la buena temporada realizada por el búlgaro. Pero la negociación está en marcha. Curiosamente, el jugador anda en su país concentrado con su selección nacional junto a Calloway, que sigue esperando el pasaporte, por lo que cuenta con informes de primera mano.