El Unics decidió en los 20 minutos que tiró el rival

Vukusic intenta colocar un tapón a Lampe.
P. Salvago / Treviso

17 de abril 2011 - 05:02

Las apuestas no fallaron y el Unics Kazan se convirtió en el primer finalista del torneo al superar sin problemas a un débil Cedevita, que no tuvo el día desde la línea de 6,75 metros (2/17 al descanso), su arma para eliminar a Estudiantes, y destapó sus limitaciones.

El conjunto balcánico que dirige el ex técnico cajista Aleksander Petrovic apenas aguantó el tipo ocho minutos. En cuanto los croatas comenzaron a acumular errores en el triple la mayor calidad del plantel ruso se impuso cual apisonadora, con sus dos bases, Lyday y Popovic (27 puntos entre los dos al descanso) como verdugos. Un parcial de 7-0 en la recta final del primer cuarto comenzó a abrir la brecha para los de Evgeny Pashutin (22-13). Al inicio del segundo acto, un 11-1 sería demoledor y definitivo (33-14), a pesar de la incansable lucha de los de Petrovic, pero no era su día. Al paso por los vestuarios, el encuentro ya estaba decidido: 47-30, con sólo dos puntos de Draper, que llegó a Treviso como MVP del torneo.

La relajación del Unics tras el asueto permitió al conjunto de Zagreb, con más puntería desde el perímetro, poner emoción al choque, y en el último cuarto llegó a ponerse a nueve puntos (68-59) de diferencia tras ir perdiendo de 21. Los rusos no se pusieron nerviosos y, cuando quisieron, remataron a su rival gracias a su quinteto titular, que anotó 80 de los 87 puntos del equipo.

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