Remolón o vacilón

El 13 de enero, hace casi un par de meses, el Cajasol tuvo en su mano despedirse de la Eurochallenge, de esta larga travesía que luego lo mandó a la lejanísima Rusia y a la incómoda, por el viaje, Chipre. No lo hizo y le dio un repaso, en plan vacilón, chulo, con un golpe de autoridad absoluto, al Ventspils letón: 98-51. Abusando de los bálticos, que parecía que no querían ni locos entrar en el Top 16, siguió el conjunto de Pedro Martínez en la competición. Ahora, dos meses más tarde, vuelve a tener una situación similar, pareja; depende de sí mismo para mandar al garete los cuartos de final, posiblemente contra el Triumph ruso, y centrarse única y exclusivamente en la Liga ACB, su mayor preocupación, por supuesto.

¿Saldrá el Cajasol con la mentalidad de avasallar al Ural Great, garantizando de esa forma su pase a los cuartos, o tendrá una actitud remolona en pos de pensar para y por la ACB, pues sólo quedan nueve finales para amarrar la salvación en un fatídico curso deportivo? Esta tarde-noche se podrá ver. Igualado a dos triunfos con los combatientes rusos, visita San Pablo el Ural Great, que ya perdió con los hispalenses en Perm. El ganador de este encuentro sella el billete a los cuartos, pues ambos tienen a su favor el average particular con el Lokomotiv Rostov.

El conjunto de Martínez da muestras de una clara recuperación, como ratifican las tres victorias en los seis últimos encuentros de la ACB, si bien para hoy contará con las importantes bajas de Rey y Tucker, quienes no han podido ser inscritos en la competición, a las que se suma la no menos vital de Milisavljevic, lesionado.

Como ha venido ocurriendo en los últimos compromisos continentales, el técnico cajista tendrá que tirar de los canteranos, por lo que el base Aguilar, el escolta Bonhome y el pívot Diouf dispondrán de minutos.

La complicación no radica sólo en los aspectos propios, sino también en el rival, que ha cambiado respecto a la ida. Para empezar, el técnico ya no es Roman Dvinyaninov, sino Aleksandar Kesar, y éste podrá contar con el ala-pívot serbo-bosnio Plisnic, quien no pudiera jugar en la ida; su promedio de 13.4 puntos y 5.8 rebotes en Eurochallenge refleja a las claras su importancia en el esquema de juego del Ural Great.

Respecto al choque en Perm, el bloque ruso a buen seguro contará con una mayor aportación de sus dos referencias principales: los estadounidenses Jones y, sobre todo, Washington (con pasaporte macedonio), este último décimo anotador de la Superliga rusa (14,6 puntos). A ellos se une otro estadounidense, Biggs, alero con pasaporte belga que se convirtió en estilete local en la ida (26 puntos y 7 rebotes), así como el internacional ruso Likholitov.

Hoy se disiparán las dudas: remolón o vacilón. La actitud de unos y otros marcará el devenir del duelo. Pedro Martínez sabe que si pasa a cuartos puede soñar con el título, pero todos tienen claro que lo crucial es la permanencia.