La sevillana Pilar Lamadrid estrena el año en Marina Rubicón con la vista puesta en París 2024

Pilar Lamadrid hacía las maletas tras las fiestas navideñas para retomar la puesta a punto con vistas a una temporada crucial para alcanzar la meta de los Juegos de París 2024. Con el Campeonato del Mundo de clases olímpicas de La Haya del próximo mes de julio en el horizonte, prueba en la que está llamada a sellar el pasaporte español para la cita olímpica gala en la clase iQFoil femenina, la vigente número 1 del ránking internacional se entrena estos días en aguas de Lanzarote con el equipo preolímpico.

En Marina Rubicón, ubicada en el corazón de la localidad de Playa Blanca, la windsurfista sevillana enraizada en El Puerto de Santa María afina su estado de forma con vistas a la que será su primera regata de 2023. Los iQFoil International Games de Lanzarote, programados del 24 al 28 de enero, servirán para estrenar el nuevo año, que no la temporada, por parte de la regatista del Club Náutico Puerto Sherry, que despedía de forma exitosa 2022 tras imponerse en casa en la Regata de Año Nuevo celebrada en la Bahía de Cádiz.

Lamadrid, que la semana próxima defenderá corona en la prueba internacional de Lanzarote, regresará tras la misma unos días a tierras portuenses. Lo hará antes de volver de nuevo a las islas, donde la Real Federación Española de Vela ha fijado la base del equipo preolímpico con la mente en el Mundial del año 2024, que será decisivo para definir la representante nacional en los Juegos de París.

La Semana de vela de Lanzarote, a mediados de febrero, será el siguiente compromiso para la líder mundial de la nueva disciplina olímpica de las tablas, que posteriormente afrontará en El Puerto el Campeonato de España, a finales de mes.

Ya en marzo, los iQFoil International Games tendrán nueva parada en Cádiz, donde intentará desquitarse de su obligada ausencia el pasado año tras contraer COVID. Tras la prueba gaditana, con Puerto Sherry como escenario, Pilar Lamadrid se concentrará en Palma de Mallorca con vistas al Trofeo Princesa Sofía, prueba valedera para la Copa del Mundo a disputar a principios de abril en la que el año pasado se proclamaba subcampeona de forma brillante ante la élite internacional de la clase.

En mayo, el siguiente destino de la andaluza, que el pasado diciembre cumplía los 26 años y se encuentra alcanzando su madurez deportiva, como demuestran los resultados de sus dos últimas temporadas, será Grecia, donde a mediados de mes se disputará el Campeonato de Europa.

Tras la prueba continental, la localidad mediterránea de Marsella, escenario de la competición de vela en los Juegos Olímpicos de París, acogerá en junio una prueba test con vistas a 2024. Y tras la misma, a finales del mismo mes de junio volverá a hacer las maletas, en este caso rumbo a tierras holandesas, donde a mediados de julio tendrá lugar el Mundial de clases olímpicas de La Haya, lugar subrayado en rojo el calendario de una Pilar Lamadrid que, a seis meses vistas, ya trabaja duro para hacer realidad el sueño de París.