Pesadilla vivida in situ

De la Liga BBVA, posiblemente sea la del Sevilla la plantilla que más futbolistas franceses tiene, por lo que se entiende que el cuerpo técnico que dirige Unai Emery decidiera comenzar la semana de trabajo con un íntimo minuto de silencio (con todos los jugadores abrazados) en memoria de las víctimas de los atentados terroristas que tienen sobrecogido a más de medio mundo desde la noche del viernes. Benoit Tremoulinas, Gael Kakuta, Kevin Gameiro, Steven N'Zonzi, Adel Rami y Thimothee Kolodziejczak forman la amplia legión francesa del Sevilla, a quienes habría que añadir a Gregzorz Krychowiak, quien pese a ser de nacionalidad polaca, ha vivido en Francia varios años y su esposa es natural del país vecino.

Se da la circunstancia de que, además, varios de ellos estuvieron muy cerca de la masacre que los yihadistas protagonizaron en diferentes puntos de París. Teniendo en cuenta que el parón liguero por los partidos de las selecciones propició que Unai Emery diera el fin de semana libre a toda la plantilla, no es difícil imaginar que varios de los franceses del Sevilla decidieran viajar a París para estar con sus familiares y amigos más cercanos cuando además, por ejemplo en el caso de Tremoulinas, no fue convocado por Didier Deschamps. De hecho, incluso la sesión de trabajo del pasado viernes se adelantó media hora para facilitar la marcha de los profesionales que tuvieran decidido viajar (la mayoría) para pasar el fin de semana fuera de Sevilla. Así, tanto Kolodziejczak, como Tremoulinas y Rami estaban en París el viernes cuando se produjeron los atentados. "Fuimos con amigos para pasar el viernes y el sábado, pero no pudimos salir el viernes, nos tuvimos que quedar en el hotel, ¡que estaba sólo a diez minutos de los atentados!", explicó a este diario Kolodziejczak, que no duda en destacar que el destino pudo haberles jugado una mala pasada. "Tenemos suerte. Todo está bien y la familia, también", reitera el jugador, que estuvo alojado en un establecimiento de la cadena Sofitel situado muy cerca de uno de los lugares donde se produjeron los atentados.

Evidentemente, en la noche del viernes, las llamadas telefónicas buscando la tranquilidad con noticias sobre el estado de familiares y amigos estuvieron a la orden del día y ninguno de los franceses del Sevilla tuvo que lamentar la cercanía de alguna víctima, pero la preocupación y la intranquilidad viven presentes y eso nunca se puede evitar. El cuerpo técnico sevillista, además, es muy sensible a esto, pues no en vano Juan Carlos Carcedo, el ayudante más directo de Emery, es el hombre que siempre está más cerca de los jugadores que llegan al vestuario desde Francia, sobre todo los nuevos, ya que como futbolista en activo pasó tres temporadas en el Niza.

A los que no afectó extrañamente este suceso fue a los miembros de la secretaría técnica que dirige Monchi, quien habitualmente suele mandar a un técnico a cada partido que se disputa en Europa cuando hay jornada de selecciones. En este caso, según ha podido saber este periódico, nadie del Sevilla estuvo presente en el Francia-Alemania disputado en Saint Denis y en el que intentaron acceder los terroristas, ya que al no haber competición en la Liga francesa el club decidió que ningún técnico viajara a esa zona y sí a otros encuentros más interesantes.