Oliver se apoltrona

Después de las medidas cautelares dictadas por la juez Mercedes Alaya, unas de las grandes interrogantes que el beticismo ansiaba conocer era saber qué iba a ocurrir con la situación de Luis Oliver al frente de Bitton Sport.

El empresario deja claro, en primer lugar, que él seguirá formando parte del consejo de administración del Betis sin barajar la posibilidad de abandonar el club: "Sí, por supuesto que seguiré. El único que no puede estar es Lopera. Nosotros vamos a seguir hasta el final y yo como responsable. Yo soy consejero por cooptación desde hace una semana. Tan válidos son unos consejeros como otros en una Junta General".

Incluso, Oliver confía en continuar al mando del Betis pese a la oposición que podrían ejercer Rufino González y Manuel Castaño, quienes aglutinan, después de Por Nuestro Betis, el mayor número de acciones: "Yo soy consejero igual que ellos. Ayer hablamos y todos apoyan nuestra gestión. Todos están contentos, como la mayoría de los béticos. Somos diez consejeros y ellos son sólo dos votos".

Después de que su señoría inhabilitase las acciones de Lopera, cabría la posibilidad de que Luis Oliver pudiera demandar al ex consejero delegado, pero el actual consejero deportivo del Betis lanza un mensaje de tranquilidad y normalidad y niega cualquier posibilidad de acudir a la vía judicial: "Bitton Sport está en una situación incómoda, pues el grupo se queda ahora sin las acciones que había comprado. Con 14 millones de euros en avales y en tierra de nadie. Nuestra compañía no va a iniciar ninguna acción legal contra nadie, porque cuando hay pelea entre accionistas béticos siempre es el Betis el que sale perjudicado. Hasta que esto no se despeje, nuestro grupo empresarial no va a llevar acabo ninguna acción contra nadie".

Además, insiste, con plena confianza, en que la compraventa se efectuó dentro de la legalidad, sin temor alguno a que se pueda producir su salida del Betis: "La compraventa es real, lo que pasa es que se dieron 14 millones de euros en avales y la juez la ha suspendido. Nosotros tendríamos que tomar medidas. No vamos a entrar en un pleito contra Lopera ni contra la oposición, porque sería perjudicial para el Betis, aunque los grupos opositores le ha hecho un daño terrible al Betis con su pleito".

Tan metido en el rol de mediador está que Oliver sigue tendiéndole la mano a los diferentes grupos opositores, pues considera fundamental el apoyo de todas las partes por el bien del club: "Nuestra postura sigue siendo la misma. Queremos respetar a todos e intentar mentalizarlos de que queremos que el club se lleve de una manera normal. Repito que nosotros no vamos a poner ningún pleito, porque eso perjudica al Betis y no queremos que sea el club el que salga perjudicado en todo esto".

Después de las noticias llegadas de los juzgados, Oliver señala que ha podido dialogar con Lopera, al que encuentra animado pese a lo dictaminado por Alaya: "No está mal de ánimos, después de conocerse el auto de la juez. Ahora empieza la batalla jurídica y él tendrá que hacer sus recursos".

Al margen de las medidas que vaya a tomar Lopera, Oliver considera que la salida del ex máximo accionista es positiva para el grupo que representa, pero sin embargo entiende que no lo es para el propio Betis. Es más, agradece el hecho de que la juez no haya tomado, de momento, la posibilidad de que un interventor judicial entre para dirigir el club: "No es nada lo que la gente ha sufrido para lo que se va a sufrir. Para mí es bueno que Lopera se haya ido, pero el pleito es malo para el Betis y el tiempo lo demostrará. Espero que la gente se crea ahora las gestiones que hemos hecho desde que aterrizamos en el club. No hay mal que por bien no venga y lo vamos a demostrar. Menos mal que la juez no ha puesto un administrador, como ocurrió en el Atlético de Madrid. Esto ha cambiado, pese a que el club esté en una delicada situación".