Nono, un futuro que ya es presente

El Betis de Pepe Mel rebosa juventud y uno de sus máximos exponentes responde al nombre de José Antonio Delgado Villar, Nono en el mundo del fútbol, quien ya ha dejado su sello en el primer equipo verdiblanco en más de una ocasión y al que no le tembló el pulso el pasado domingo para dirigir el juego bético. Y es que si algo ha demostrado Nono en el último año, desde que dio el salto al filial en edad juvenil como con su paso con los mayores, es personalidad, de ahí que en el club lo consideren el sustituto ideal de Beñat si éste finalmente acaba saliendo del club.

"Se decidió que yo volviera al filial y yo intento ayudar donde sea. El Betis B está levantando poco a poco la cabeza y jugaré donde me digan. Tengo 19 años y todavía tengo mucho que aprender de gente como Cañas o Beñat. Quiero seguir jugando y madurando para a medio plazo llevar el juego del Betis", señala el propio centrocampista portuense, lugar en el que recibe los consejos de un ex bético como Joaquín. Nono comparte charlas veraniegas con el otrora extremo internacional verdiblanco, ya que comparte amistad con allegados suyos. "Jugué en el Safa, el mismo equipo del que él salió y siempre me ha dicho que no deje de luchar", admite.

Las numerosas bajas que acumula Mel provocaron la presencia de Nono como titular en el duelo ante el Levante, algo que podría repetirse este jueves ante el Atlético, precisamente el equipo del que recaló en el Betis. Entonces, Nono no se había adaptado a la vida en la capital madrileña, por lo que dejó sus categorías inferiores para recalar en el club verdiblanco en edad cadete. "Ha madurado mucho y se le nota en cada entrenamiento", admite un técnico del Betis que lo conoce desde su llegada.

Mel no dudó en hacerlo debutar la pasada temporada y el centrocampista dejó buenos detalles ante el Sporting y el Barcelona, algo que confirmó durante el verano en la pretemporada. Incluso su buen rendimiento le ganó quedarse como un jugador más del primer equipo, pese a contar con dorsal del filial, pero la acumulación de centrocampistas y la mala situación clasificatoria del segundo equipo provocaron que volviera a competir con los más jóvenes.

"Es una alegría ver tantos canteranos jugando. Es lo que quiere el club y todos nosotros. Estamos contentos de que nos den la oportunidad. Me dan mucha confianza los compañeros y el míster, eso luego se refleja en el campo. Cada vez que ha subido algún canterano, no lo hemos hecho mal y se ha notado que pueden confiar en gente de la casa", manifestó el canterano.