Miki Roqué y Calero visitan hoy la clínica Dexeus

Miki Roqué marchó el mismo domingo hacia su localidad natal, Tremp (Lérida) para decidir junto a su familia en qué hospital va a ser intervenido quirúrgicamente, ya que por fortuna tiene la opción de hacerlo prácticamente en el que desee, tal es el apoyo que le han brindado en todo momento tanto las personas con capacidad de decisión en el club como sus propios compañeros.

Lo acompaña en la capital catalana el jefe de los servicios médicos del club, Tomás Calero, con la historia médica del futbolista, y hoy visitarán la clínica Dexeus, en la que probablemente se lleve a cabo la operación, toda vez que Miki Roqué, por el factor anímico, muy importante en estos casos, prefiere estar cerca de los suyos. Además, uno de los médicos del Fútbol Club Barcelona, que trabaja en la Clínica Dexeus, es del pueblo de su madre y amigo de la familia.

Con todo, cuando la plantilla supo el viernes por boca de Pepe Mel y de Tomás Calero, el alcance de la enfermedad de su compañero se puso a disposición de éste e incluso le transmitió que todos sus integrantes, técnicos incluidos, estaban dispuestos a sufragarle económicamente la intervención en Houston o en el lugar del mundo que él eligiese.

Mel, por ejemplo, se ha sentido muy descargado de presión al ver la respuesta de Miki Roqué, quien quiso comunicar él mismo la noticia, dando muestras de una entereza inusual. El entrenador y el propio médico sabían la noticia días atrás, a falta de la confirmación, y hasta tuvieron que frenar al futbolista en su ansia por entrenarse pese a sus dolores de espalda.

"Para mí ha sido un motivo de alivio verlo a él. Rafa y yo, sentados a su lado, no podíamos ni hablar. Nos dio una lección a todos. Tiene 22 años y la vida ha sido muy cruel con él, pero es muy fuerte y sabe que tiene la ayuda total de todos nosotros, moral y económicamente. Me ha sorprendido su comportamiento, su fortaleza, y por eso estoy convencido de que va a lograr su objetivo, que es volver a jugar al fútbol", dijo Mel sobre un futbolista que hoy sabrá los algunos de los pormenores de su operación y, probablemente, decida dónde y cuándo pasará por el quirófano.