Metamorfosis en Cornellà
sevilla | espanyol
Aguirre ha devuelto la sonrisa a la afición perica, que con Pochettino veía ya lejos la Primera División Verdú, Sergio García y Colotto, pilares
Dos victorias en las primeras 13 jornadas acabaron con el ciclo de Mauricio Pochettino como entrenador del Espanyol. El jugador extranjero que más veces ha vestido la elástica blanquiazul decía adiós a un periodo de casi cuatro años en Cornellà, en el que sacó al equipo del descenso en su primer ejercicio y lo mantuvo en la tranquilidad en los tres siguientes. Pero, como siempre en el fútbol, mandan los resultados. Por ello, la entidad presidida por Joan Collet quiso dar un giro a la situación destituyendo al argentino y contratando a un hombre experto y con experiencia en el fútbol como Javier Aguirre.
La jugada no le pudo salir mejor al club catalán. Desde que el Vascoocupa el banquillo, el equipo espanyolista es otro, con protagonismo de jugadores defenestrados por Pochettino y con unos pilares sólidos en todas sus líneas. El objetivo, como en los últimos años, es no pasar apuros, pero la igualdad reinante por alcanzar puestos europeos ha posibilitado que el Espanyol pueda soñar con la posibilidad de pasearse por el viejo continente.
SIN BALÓN
Aguirre ha basado la recuperación del Espanyol en hacerse fuerte en todas sus líneas. Si con el anterior técnico el equipo perico sufría en demasía sin la posesión de balón, con el mexicano el músculo en la totalidad del campo ha desembocado en seguridad.
En la portería Kiko Casilla se ha hecho con el puesto que desde el inicio de campaña era de Cristian Álvarez. Sus buenas actuaciones han dejando a los blanquiazules como el sexto equipo menos goleado. A ello ha contribuido una zaga que tiene en Colotto a su principal exponente. Héctor Moreno y Forlín apuntalan la zona central de la defensa, con Javi López y Capdevila, en el lateral derecho e izquierdo, respectivamente.
Además, con la presión desde la primera línea de ataque y el incansable trabajo de Víctor Sánchez en la medular Aguirre ha creado la fórmula para que el equipo sufra lo menos posible.
CON BALÓN
Si la retaguardia tiene en Colotto su capitán, Verdú es el patriarca en la zona de creación. Criado en La Masía, el catalán ha hecho olvidar a ilustres figuras recientes espanyolistas como Iván de la Peña o Raúl Tamudo. Su visión de juego y su calidad con la pelota en los pies lo han llevado a destacar por encima del resto. Algunos ya piden, incluso, la llamada de Vicente del Bosque para hacerlo internacional.
Por delante de Verdú, un viejo conocido por Sevilla como Sergio García pone los goles, repartiéndose los minutos con Stuani. Entre los tres suman 22 de los 42 goles que el Espanyol acumula en la temporada. Las internadas de un trotamundos como Simao ofrecen una vía diferente de ataque al juego de toque de Verdú.
LO MEJOR
La pareja que forman arriba Verdú y Sergio García.
LO PEOR
Sus irregulares números en casa.
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