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Messi por fin es feliz con Argentina

Grupo B · Argentina-Nigeria

Messi deja atrás las dudas que ha sembrado siempre con su selección tras ser el mejor de su equipo ante Nigeria.

Argentina debuta con victoria ante Nigeria gracias a un solitario gol de Heinze. / EFE
Sebastián Fest Y Joaquín Cavanna (Dpa)

12 de junio 2010 - 21:08

Necesitó llegar a un Mundial y al invierno sudafricano para liberarse: Leo Messi fue este sábado el jugador que tantas veces le reclamaron sus compatriotas, la única luz potente en una Argentina triunfante, pero con dudas.

"Yo se lo dije. Fue, sin ningun tipo de dudas, el mejor partido de Lio desde que está en la selección", dijo Juan Verón, el veterano que comparte habitación con Messi y que hoy no le perdió ojo a la "pulga" del Barcelona, tranquilizándolo incluso cuando los nervios lo superaban en un saque de banda.

Argentina tiró este sábado siete veces entre los tres palos, y cuatro de las ocasiones fueron de Messi, que a 12 días de cumplir 23 años se sacudió la pesadumbre anímica que tantas veces le generó la selección.

Messi debutó oficialmente en la era Maradona en Argentina el 28 de marzo de 2009 ante Venezuela, y jugó un buen partido. Pero luego llegaron las turbulencias y la selección comenzó a pesarle.

"Ganamos, que era lo más importante", destacó Messi.

"Lamentablemente nos faltó definir las ocasiones que generamos pero nos vamos con la alegría de haber ganado", agregó el argentino, que ya a los 47 segundos de juego generó peligro viboreando en el área.

Estaba, claramente, encendido y dispuesto a demostrar que las frases del último años -"no siente la camiseta", "sólo juega por dinero"- eran infamias.

Las jugadas de gol se sucedieron, pero también las habilitaciones a sus compañeros. Vincent Enyeama lo frenó con ayuda. "Me ayudó Dios", dijo el nigeriano. Ante semejante dupla incluso un Messi debe inclinarse.

Fue una jugada suya tras pase de Tevez la que derivó en el córner y el posterior gol de cabeza de Heinze.

Messi, hombre habitualmente de pocas palabras, marcó la diferencia entre lo que esperaba para hoy y el calvario que por momentos vivió en las eliminatorias sudamericanas.

Él sabía, dijo, "que iba a ser un partido diferente a las eliminatorias".

El Ellis Park, el escenario en el que hace más de cuatro décadas nació la leyenda de la selección argentina de rugby, Los Pumas, vio brillar a Messi, que se instaló en el centro de ataque y fue el eje en los últimos 30 metros.

"Jugar retrasado me hizo entrar más en contacto con la pelota y pude moverme en los últimos metros con mayor facilidad", analizó Messi, coincidiendo con su entrenador, Diego Maradona, que definió como casi un crimen alejar a Messi de la pelota, ni más ni menos que lo que le sucedió al argentino en las eliminatorias.

"No sería lindo el fútbol sin ver a Messi que toque la pelota, hoy hizo cosas bárbaras", certificó Maradona.

Verón destacó el escenario en el que se produjo la actuación de Messi: "Un Mundial, en un primer partido".

"Con todo el peso que le quieren tirar, la rompió (jugó muy bien)", añadió Verón, que bromeó con su posición de mentor, casi padre, de Messi: "Después tomaremos unos mates y esperemos que descanse el nene'".

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